Rimsha Masih, la niña con síndrome de Down acusada de blasfemia en Pakistán, en una cárcel para adultos

Rimsha Masih, la niña con síndrome de Down acusada de blasfemia en Pakistán, en una cárcel para adultos

Las autoridades paquistaníes han revelado que la niña cristiana paquistaní Rimsha Masih, acusada de blasfemia, se encuentra detenida en una cárcel ordinaria a pesar de su corta edad y de tener síndrome de Down.

"Está en el módulo de prisión preventiva junto a las mujeres adultas y en principio seguirá allí hasta que los jueces se pronuncien sobre su caso", dijo a Efe un funcionario de la prisión de Adiala -donde se encuentra la menor-, Arsalán Ahmed.

Según el diario local Express Tribune, la niña no ha podido recibir visitas ni de abogados ni de representantes de organizaciones de derechos humanos, que han denunciado la situación de Rimsha, cuya familia ha huido por miedo a represalias.

La niña se vio envuelta el viernes en un incidente aún por aclarar, pero que desembocó en acusaciones de blasfemia por parte de vecinos de la menor, que había salido a buscar combustible para quemar en su hogar y, al parecer, recogió por error unos papeles con versos del Corán.

Como suele ser habitual en casos de acusación, no solo la familia de la acusada sino otras familias cristianas de la zona han abandonado sus casas por el riesgo de que se produzcan ataques de turbas de integristas radicales, según diversas fuentes.

El presidente de Pakistán, Asif Ali Zardari, tomó este fin de semana nota del caso y dijo, según su portavoz, que aunque no puede condonar una pena por blasfemia, nadie puede usar la ley para solucionar trifulcas personales.

LA LEY CONTEMPLA LA PENA DE MUERTE

El incidente se produce en medio de un intenso debate sobre la estricta ley contra la blasfemia en Pakistán.

Esta norma, que fue aprobada durante el mandato del dictador militar islamista Mohamed Zia-ul-Haq (1977-88), contempla incluso la posibilidad de la pena de muerte por difamación contra el Islam o su profeta.

Esta legislación ha sido utilizada a menudo para saldar cuentas por enemistades personales con miembros de grupos religiosos minoritarios, entre denuncias de numerosos activistas y defensores de los derechos humanos que abogan por que sea derogada.

En Pakistán, país creado en 1947 como patria para los musulmanes del subcontinente indio, aproximadamente el 97% de la población profesa el Islam, según el último censo de las autoridades.