Desconectar del trabajo en vacaciones: seis recomendaciones básicas para olvidarte de la oficina

Desconectar del trabajo en vacaciones: seis recomendaciones básicas para olvidarte de la oficina

GTRES ONLINE

En tus últimas vacaciones, ¿cuántas veces tuviste contacto con la oficina? ¿Recibiste algún WhatsApp del trabajo? ¿Tuviste que resolver algún asunto por correo electrónico?

Si acabas de asentir con la cabeza, esto te interesa. Para nueve de cada diez españoles, es imposible desconectar en vacaciones. Así se desprende de un estudio recién publicado por BQ, una empresa española de electrónica de consumo, que arroja otro dato: sólo el 6,9% de los españoles apaga su teléfono en sus días libres.

No llegar a desconectar durante el periodo estival es contraproducente tanto para la empresa como para el empleado. Según la psicóloga y conferenciante Patricia Ramírez, si durante las vacaciones no rebaja el nivel de estrés, el trabajador pierde la creatividad, la capacidad de reacción y termina agotado; un cóctel que sólo produce la sensación de estar quemado.

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¿Quiénes son los que más sufren esta situación? Según un estudio de Randstad, a mayor nivel formativo, más difícil resulta escapar de la rutina. Concretamente, el grupo más afectado es el de las mujeres de entre 25 y 34 años con estudios universitarios.

Lograr abstraerse de lo laboral y controlar el 'bombardeo' de mensajes y llamadas que nos pueden llegar desde el trabajo puede parecer complicado, pero te ofrecemos seis pautas sencillas para que disfrutes más de tus vacaciones, te olvides de la oficina y vuelvas renovado sin que haga falta que te vayas lejos.

1. DÉJALO TODO ATADO

Es algo lógico, pero que no siempre cumplimos. En palabras de Patricia Ramírez, "dejar fuegos encendidos que luego tendrás que apagar en vacaciones no es una buena idea". Lo ideal es dejar todo cerrado a tiempo y saber delegar adecuadamente: "Hay que pensar en alguien que te sustituya, no en alguien que te esté avisando de lo que ocurra durante el tiempo que estás fuera".

En el mismo sentido, Silvia Prieto, experta en TICs de la Universidad a Distancia de Madrid, recomienda que si es indispensable, se designe a una sola persona de confianza que pueda llamarte en casos de extrema urgencia. Así, sabes que estarás informado en caso de que ocurra algo importante y el teléfono no interrumpirá constantemente tu descanso.

En cuanto a los correos electrónicos, lo más útil es programar un mensaje de autorrespuesta con un "ausente por vacaciones" con los datos de contacto de esa persona que está de guardia.

2. FIJA UNA FRANJA DE CONTACTO

Tener el teléfono en el bolsillo muchas veces implica estar recibiendo llamadas de trabajo, mensajes de WhatsApp, o notificaciones constantes de correos electrónicos. Lo ideal sería olvidarse del móvil por completo, pero admitámoslo, suena casi utópico. Si no se quiere apagarlo del todo, lo recomendable es dejarlo en hotel u apartamento durante el día para no sufrir la ansiedad de mirarlo todo el rato.

Las expertas coinciden en que lo idóneo es fijar un momento de conexión al día. Silvia Prieto propone el ejercicio de pasar el día sin el móvil y reservarse cinco minutos por la noche para mirarlo. Si se prevé que durante las vacaciones el contacto con la oficina va a ser más o menos constante, Patricia Ramírez sugiere pactar una franja en la que estar disponible: "Por ejemplo, acordar que sólo te puedan llamar entre las 7 y las 9 de la noche, o que sólo se va a ver el correo en determinado momento del día".

Mención aparte merecen las redes sociales. Si se usan para entretenerse, mantener el contacto con amigos o compartir fotos del verano, adelante, pero si forman parte del trabajo diario, habría que aparcarlas hasta la vuelta.

3. TEN UN PLAN B

Esperemos que no pase, pero ponte en lo peor: ¿qué hacer si ocurre algo importante en la empresa que tienes que resolver durante tus vacaciones? Teniendo pensado cómo actuar en caso de emergencia, podrás marcharte tranquilo.

Ten a mano o de manera accesible los contactos, contraseñas o documentos que puedes necesitar si vas a estar fuera. Sistemas de trabajo 'en la nube' disponibles estés donde estés puede ser una buena opción, según señala Silvia Prieto.

4. UNA COSA CADA VEZ

El término 'multitarea' está muy bien para los ordenadores, pero no deberíamos aplicárnoslo en nuestras vacaciones. Patricia Ramírez recalca la necesidad de mantener la concentración en una sola cosa: "Si se está tomando el sol, se está tomando el sol; no tumbado cinco minutos, luego me levanto a por el móvil, reviso si hay algo, me tumbo otro poco...".

5. APÚNTATE A LO SLOW

Cambiar el ritmo es importante para desconectar. Durante todo el año madrugamos, seguimos una rutina, vamos acelerados... pero las vacaciones son el momento para bajar el ritmo y dejar fuera las prisas. "Si estás descansando, tómate tiempo para hacer las cosas. No hay que hacer la compra corriendo, o bajar a la playa con prisa", puntualiza Ramírez. "Tardar cinco minutos más o menos no importa en vacaciones". Es defensora del 'slow and flow': las cosas despacio y que fluyan.

6. ATENCIÓN A LOS PLACERES

Para lograr desconectar, es importante centrar nuestra atención fuera de la esfera laboral. Para Patricia Ramírez, es fundamental lograr conectar con las cosas que nos hacen sentir bien y recrearse en lo que a uno le gusta.

Dedicar un rato a una afición que tengamos, practicar un deporte que nos motive o un rato al aire libre bastan para conseguir una sensación placentera que nos ayude a olvidarnos de la rutina.

PARA LOS 365 DÍAS DEL AÑO

Hay un consejo esencial que puede aplicarse todos los días, no sólo en vacaciones Si no logras desconectar del trabajo aunque sea unos minutos al día, sólo alimentarás una sensación de desequilibrio, asegura Ramírez. Por eso, procura encontrar pequeños placeres a tu alrededor para que cada día tenga su dosis de desconexión.