'El umbral de la eternidad': el punto final a la trilogía de Ken Follett
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'El umbral de la eternidad': el punto final a la trilogía de Ken Follett

Título:El umbral de la eternidad

Autor:Ken Follett

Editorial:Plaza y Janés

Páginas: 1.152. Pesa, pesa bastante: 1.560 gramos, exactamente.

Precio: En tapa dura (por ahora el único que hay), unos 24 euros. En e-book, a partir de 11 euros.

Fecha de lanzamiento: 16 de septiembre de 2014.

¿De qué va?

La trama mezcla lo que ocurre en la vida de cinco familias (una rusa, una inglesa, una estadounidense, una ruso-estadounidense y una alemana) durante los años sesenta con la historia real: Martin Luther King, el Berlín dividido, el ascenso de Nikita Jrushchov... la Guerra Fría, básicamente. De hecho, las familias llevan mezclándose con la historia desde miles de páginas atrás: las 1.024 de La caída de los gigantes y las 960 de El invierno del mundo.

¿Por qué se habla tanto de este libro?

Porque va a ser un superventas. Tres semanas antes de su lanzamiento ya se podía encontrar en preventa en algunas librerías, tanto físicas como online. El umbral de la eternidad

forma parte de la trilogía The Century (El Siglo), que tuvo sus dos primeras entregas con La caída de los gigantes y El invierno del mundo, también bombazos literarios a nivel mundial.

Así que no solo oirás hablar de él: lo verás por todas partes en librerías, papelerías, webs y todo sitio en el que puedas encontrar una hoja de papel.

¿Quién lo escribe?

El galés Ken Follett es el rey del best-seller literario. Aunque le costó alcanzar la fama, este periodista de profesión se pasó a la literatura a finales de los años setenta (cuando ya rondaba la treintena). Su primer éxito llegó en 1978 con La isla de las tormentas, pero el bombazo global llegó cuando en 1989 publicó Los pilares de la Tierra, que 25 años después sigue siendo el libro más leído en España, según la Federación del Gremio de Editores. Sus 30 novelas han vendido 150 millones de ejemplares, y solo con los dos primeros tomos de esta trilogía ha llegado a dos millones de lectores en lengua española.

Ahora vuelve a plantear una trilogía ambiciosa: el primer libro estaba ambientado en la I Guerra Mundial; el segundo parte del auge de Hitler y acaba cuando finaliza la II Guerra Mundial; y este tercero está situado en la Guerra Fría y acaba tras la caída del Muro de Berlín. Las historias que se entrecruzan en la primera de las novelas continúan con la siguiente generación en la segunda. En esta tercera, son los nietos de los Peshkov y los Dewar en Estados Unidos, los Von Ulrich en Alemania o los Dvorkin en Moscú los que toman el relevo y luchan con enemigos algo distintos a los que se enfrentaron sus padres y abuelos. Ahora la pelea es por los derechos civiles de la comunidad negra en Estados Unidos o contra el más duro comunismo en la Rusia de Jrushchov. Todo ambientado en distintos escenarios de todo el mundo y con personajes históricos reales que se mezclan con la historia de ficción.

¿Quién debería leerlo?

A quienes le gusten los tochazos superventas y quieran ponerse al día con la historia de Europa más reciente. Si te apetece meterte en historias cruzadas (pero fáciles de seguir), con personajes luchadores y con conciencia social (a veces demasiada), pero sin calentarte demasiado la cabeza, es para ti.

Nuestra opinión:

Si te has leído los dos primeros (y dos millones de personas lo han hecho solo en castellano) no te puedes ir sin saber qué pasa con las vidas de las familias que conociste en la primera entrega, La caída de los gigantes, y la segunda, El invierno del mundo. Aunque es posible que se te mezclen en la cabeza y ya no sepas quién era el padre de uno y el abuelo de la otra... Algo típico en estas sagas.

El de Follett es un libro absolutamente comercial, y que venderá muchísimo estas primeras semanas, más aún de cara a Navidades. No hay que negar que tiene intención: las historias de las familias están estructuradas y han pasado por prácticamente todos los acontecimientos históricos del siglo, a veces un poco con calzador. Se ha visto desde la Guerra Civil Española hasta los destierros siberianos, pero todo de forma sencilla y fácil de leer. No hay que olvidar que no es un libro de historia, sino una novela de personajes.

Las primeras líneas:

La policía secreta convocó a Rebecca Hoffmann un lunes lluvioso de 1961.

La mañana había empezado como otra cualquiera. Su marido la acompañó al trabajo en su Trabant 500 color canela. Las antaño elegantes calles del centro de Berlín aún conservaban solares arrasados por los bombardeos de la guerra, salvo allí donde se habían construido nuevos edificios de hormigón que se alzaban erguidos como dientes falsos y mal emparejados. Hans iba pensando en su trabajo mientras conducía.

—Los tribunales están al servicio de los jueces, de los abogados, de la policía, del gobierno… de todo el mundo menos de las víctimas de la delincuencia —comentó—. Algo así es de esperar en los países capitalistas occidentales, pero bajo el comunismo los tribunales deberían estar claramente al servicio del pueblo. Mis colegas no parecen darse cuenta de ello. —Hans trabajaba en el Ministerio de Justicia.

—Llevamos casi un año casados y te conozco desde hace dos, pero nunca me has presentado a ninguno de tus colegas —repuso Rebecca.

—Te aburrirían —adujo él de inmediato—. Son todos abogados.

—¿Hay alguna mujer entre ellos?

—No. En mi sección, por lo menos, no.

La entrevista

Follett estará en España este septiembre y hablará sobre la tercera parte de la trilogía, pero aquí puedes ver la de Página 2 con motivo de la publicación de El invierno del mundo.

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