Estas empresas cambian de nombre porque se llaman ISIS, el grupo yihadista Estado Islámico
Hay un rumor que corre entre los fans de la serie de televisión Downton Abbey desde el 26 de octubre. Se dice que la perra de la familia Crawley podría desaparecer de la emisión porque se llama Isis, igual que el acrónimo en inglés del grupo terrorista yihadista Estado Islámico, aunque al can la llamasen así por la diosa egipcia.
El grupo terrorista se llamaba en un principio el Estado Islámico en Irak y el Levante (EIIL en español, ISIS en inglés), pero en junio, cuando proclamó el califato en el norte de Siria y el este de Irak, simplificó su nombre y lo dejó en Estado Islámico.
Se ha hablado tanto de este grupo en los últimos meses, sobre todo por las decapitaciones de rehenes británicos y estadounidenses, que a muchos les da miedo llamarse igual. La coincidencia en la denominación de la mascota de Downton Abbey no es la única.
El 23 de octubre una empresa de chocolate belga anunció que iba a cambiar su denominación porque la asociación con los yihadistas le perjudicaba. "Si hubiésemos sabido que existía esta organización terrorista no habríamos elegido nunca ese nombre", ha dicho a Reuters la empresa, creada en 1923 como Libeert. Según ha explicado, ha perdido sobre todo clientes internacionales.
La serie de dibujos animados de espionaje Archer tomó una decisión similar el 10 de octubre. El creador del programa, Adam Reed, y el productor ejecutivo Matt Thomson, explicaron que iban a eliminar la International Secret Intelligence Service (ISIS), donde se desarrollaba la acción.
A partir de ahora, el protagonista trabajará en la CIA. "No utilizaremos nunca más el nombre ISIS. Es realmente atroz y no queremos tener ninguna relación [con este grupo]", según Thomson. "FX (la cadena que emite la serie) tiene muchos productos derivados de ella. Imagino que todos van a acabar en la papelera".
Lo mismo le pasó a finales de septiembre a ISIS Equity Partners, que compra y vende empresas británicas. "No será una sorpresa para nadie que hayamos decidido cambiar de nombre. No queremos compartirlo con una organización terrorista", explicó un responsable.
Otra empresa de soluciones de pago por móvil, Isis, se vio obligada a hacer una maniobra similar a principios de septiembre, solo siete meses después de su lanzamiento en el mercado estadounidense. La aplicación ahora se llama Softcard.
Otras empresas se resisten, como un grupo farmacéutico estadounidense cuyo jefe declaró a NBC que prefería ver cómo cambiaban su nombre los yihadistas. Igual que el Institute for Science and International Security, deseosos de que los medios de comunicación dejen de utilizar el acrónimo que ya no usan los terroristas.
La empresa británica de juguetes eróticos Ann Summers se vio inmersa en la polémica por el lanzamiento de su colección ISIS justo cuando decapitaron al periodista James Foley.
Un portavoz de la empresa aseguró que el nombre se había elegido mucho antes en honor a la diosa Isis. Después de haberse disculpado por la "desafortunada coincidencia", la marca dijo que era demasiado tarde para cambiar nada.
Este artículo fue publicado originalmente en la edición francesa de The Huffington Post y ha sido traducido del francés.
