Josep Lluís Núñez se queja de que tiene frío en la cárcel

Josep Lluís Núñez se queja de que tiene frío en la cárcel

EFE

Josep Lluís Núñez tiene frío en la cárcel. El expresidente del Barcelona y su hijo, que comparten una celda doble en un módulo aislado de seguridad de la cárcel Quatre Camins de La Roca del Vallès (Barcelona), se han quejado a los funcionarios de prisiones del frío que estaban pasando durante la noche de este domingo, la primera que han pasado en la cárcel.

Ambos ingresaron en el centro penitenciario para cumplir su condena de dos años y dos meses de prisión por cohecho activo y falsedad documental en el caso Hacienda.

Según han informado a Efe fuentes penitenciarias, la dirección de la cárcel ha asignado a Josep Lluís Núñez y a su hijo Josep Lluís Núñez Navarro una celda doble en el Departamento de Medidas de Seguridad (DMS), un recinto aislado del resto de la prisión que solo existe en Quatre Camins y que está reservado en principio para policías y miembros de la judicatura.

Tras cenar el menú del día, compuesto por sopa y pan con queso y embutido, ambos -el hijo algo más nervioso, según las mismas fuentes- han dormido en la misma celda y se han quejado a los funcionarios de prisiones del frío.

Los internos de DMS, una veintena de presos que en su mayoría son miembros de los cuerpos y fuerzas de seguridad, llevan una vida aislada del resto de reclusos de la prisión, ya que no comparten con ellos ningún espacio común, ni el comedor ni el patio.

En principio, los reclusos del Departamento de Medidas de Seguridad -módulo en el que cumplió su condena el exjuez Luis Pascual Estevill- disponen de celdas individuales, pero en el caso de los Núñez la dirección de la prisión les ha permitido compartir una en atención a sus vínculos familiares.

MEDIDAS DE SEGURIDAD EXTREMA

El DMS está pensado para albergar a reclusos que necesitan estar sujetos a medidas de seguridad extremas para evitar ser agredidos por el resto de internos, por lo que en principio está pensado para miembros de cuerpos y fuerzas de seguridad, jueces y funcionarios de prisiones.

Sin embargo, en este caso la dirección de la cárcel ha estimado que si los Núñez ingresaban en un módulo ordinario podría existir riesgo de ser agredidos o acosados por el resto de reclusos, al tratarse de personas de relevancia pública.

¿RÉGIMEN ABIERTO?

Por otra parte, en un plazo máximo de dos meses la Junta de Tratamiento de la prisión de Quatre Camins deberá proceder a la clasificación penitenciaria de los dos y decidir si les concede el régimen abierto, con lo que solo estarían obligados a acudir a dormir a la prisión.

La Junta de Tratamiento de la cárcel está integrada por juristas, psicólogos y técnicos médicos que clasifican a los internos en función de su actitud en el centro penitenciario y de sus circunstancias personales, han explicado a Efe fuentes penitenciarias.

Por ese motivo, lo más probable es que el padre, de 83 años, sea el primero en beneficiarse de un tercer grado penitenciario si la Junta de Tratamiento tiene en cuenta su avanzada edad.

Asimismo, ambos podrían lograr la libertad condicional una vez cumplidas tres cuartas partes de su condena, poco más de seis meses en este caso, aunque para conseguir salir de prisión es necesario que primero hayan pasado una temporada en régimen abierto.

En 2011, la Audiencia de Barcelona condenó a Núñez y a su hijo a seis años de prisión por cohecho activo y falsedad documental. Según la sentencia, a finales de los 90, en plena época del "pelotazo", se tejió una trama de corrupción en la que algunos empresarios sobornaban a exaltos cargos e inspectores de Hacienda para que hicieran la vista gorda en las inspecciones a sus sociedades.

A principios de enero de este año, el Supremo rebajó la pena a los Núñez reduciéndola hasta los dos años y dos meses.