Rajoy cambia "las Navidades de la recuperación" por "unas Navidades muy tristes"

Rajoy cambia "las Navidades de la recuperación" por "unas Navidades muy tristes"

EFE

En apenas cuatro días, el presidente del Gobierno, Mariano Rajoy, ha pasado de decir que "la crisis ya es historia" y que estas iban a ser "las primeras Navidades de la recuperación" a reconocer que, para mucha gente, estas festividades "probablemente van a ser muy tristes".

El jefe del Ejecutivo ha ido moderando su optimista discurso respecto a la situación económica tras las críticas a sus palabras del pasado día 11, cuando dijo:

"La recuperación ya se vive en los mostradores de los pequeños negocios, en los pedidos de los proveedores, en las barras de las cafeterías, en las mesas de los restaurantes, en las nóminas de muchos españoles y en el interior de los hogares (...) Hoy podemos decir que, en muchos aspectos, la crisis ya es historia del pasado. Y podemos decir que estas Navidades van a ser las primeras Navidades de la recuperación".

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Sin embargo, tras las críticas a estas palabras, procedentes incluso desde el propio PP, como señalaba el sábado el diario El País, Rajoy tuvo que modular este lunes su discurso.

Lo hizo paulatinamente. Primero, tras la firma del acuerdo con sindicatos y patronal sobre la ayuda a los parados sin prestación, cuando reconoció lo siguiente:

"La recuperación no será completa hasta que no llegue a cada español que no tiene trabajo y no se sienta en los bolsillos de todos los españoles. (...) La recuperación no ha llegado a todos ni a todos por igual".

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Y después durante la cena de Navidad del PP de Madrid, donde cambió las felices Navidades por esta otra reflexión:

"Soy muy consciente, lo soy, de que muchos españoles querrían sumarse al optimismo pero aún no están en disposición de hacerlo. Muchos españoles que aún no han encontrado un empleo y para quienes estas Navidades, probablemente van a ser muy tristes".

Aun así, Rajoy considera que los datos de la recuperación son "incontestables" y que el PP ha de "conjurarse para llegar todos juntos y con éxito hasta el final". "Quedan doce meses para llegar a buen puerto. Llegaremos a él, que nadie lo dude. (...) No vamos a descansar hasta poner la última piedra, y en esta larga carrera de fondo vamos a dar lo mejor de nosotros mismos en el sprint final", ha añadido.