El fiscal Alberto Nisman murió de un disparo en la cabeza

El fiscal Alberto Nisman murió de un disparo en la cabeza

AFP

La autopsia al fiscal Alberto Nisman, que investigaba el atentado perpetrado el 18 de julio de 1994 contra la sede de la Asociación Mutual Israelita Argentina (AMIA) en Buenos Aires, ha confirmado que murió por un disparo en la cabeza realizado por la pistola encontrada junto al cadáver, según ha informado la agencia de noticias Télam.

Al parecer, la bala entró por el parietal derecho, ubicado dos centímetros encima de su oreja, y no llegó a salir de la cabeza, según el informe preliminar que han enviado los forenses a la fiscal del caso, Viviana Fein.

"El plomo que extrajeron los forenses de la cabeza de Nisman durante la autopsia se corresponde en un 99 por ciento al arma secuestrada en la escena del hecho", ha dicho, por su parte, una fuente judicial a Télam.

En estos momentos, Fein trata de determinar la propiedad de la pistola. De acuerdo con el Registro Nacional de Armas (Renar), Nisman tenía dos armas a su nombre, pero no se sabe si la hallada junto al cadáver es una de ellas.

Sin embargo, la prensa argentina informa de que Nisman habría pedido a un amigo suyo que le dejara esta pistola por cuestiones de seguridad. Fein habría llamado a declarar a este testigo para escuchar su relato en las próximas horas.

Además, la Policía Federal analiza el teléfono móvil de Nisman para saber cuáles fueron las últimas comunicaciones del fiscal del caso AMIA antes de morir.

El cadáver de Nisman ha sido encontrado en el baño de su casa de Buenos Aires. La puerta de la vivienda estaba cerrada con llave por dentro, por lo que las autoridades argentinas están investigando el caso como un posible suicidio.

DENUNCIA CONTRA EL "KIRCHNERISMO"

La semana pasada Nisman señaló a la presidenta argentina, Cristina Fernández de Kirchner, y a su ministro de Exteriores, Héctor Timerman, entre otros, como autores y cómplices de encubrimiento agravado de los sospechosos iraníes, así como de otros delitos conexos, como obstrucción e incumplimiento de los deberes de funcionario público.

"La señora presidenta ordenó desviar la investigación, abandonó años de un legítimo reclamo de Justicia y buscó librar de toda sospecha a los imputados iraníes, contradiciendo su probada vinculación con el atentado. Decidió fabricar "la inocencia de Irán"", dijo en un escrito de 300 páginas.

Así, el representante del Ministerio Público solicitó, además de una declaración indagatoria, un embargo preventivo de los bienes de Fernández de Kirchner y los demás acusados por 200 millones de pesos (19,7 millones de euros).

ATENTADO CONTRA LA AMIA

El atentado contra la AMIA, que dejó 85 muertos y 300 heridos es el mayor ataque terrorista perpetrado en suelo argentino, a pesar de lo cual sigue sin resolver, principalmente, porque los sospechosos, cinco iraníes entre los que se encuentran el ex presidente Akbar Hashemi Rafsanjani y el ex ministro de Defensa Ahmad Vahidi, nunca han sido interrogados.

En 2013, los gobiernos de Fernández de Kirchner y Mahmud Ahmadineyad firmaron un Memorando de Entendimiento (MOE) con el objetivo de "destrabar una causa que estaba absolutamente inmovilizada".

El MOE permitía por primera vez a las autoridades argentinas interrogar a los acusados en el país suramericano del atentado contra la AMIA, algo a lo que la República Islámica se había negado insistentemente.