Raúl y Mamen cuentan a 'Vanity Fair' cómo es su vida en Nueva York

Raúl y Mamen cuentan a 'Vanity Fair' cómo es su vida en Nueva York

VANITY FAIR

Un par de meses después de retirarse del fútbol a los 38 años, Raúl González Blanco concede su primera entrevista en pareja junto a su mujer a la revista Vanity Fair. Desde su casa en Nueva York, Mamen Sanz habla de su día a día en 'La Gran Manzana', sus rutinas, intimidades y proyectos de futuro.

“En Nueva York casi no usamos el coche. Vamos en metro o caminando. No es una ciudad pensada para cinco niños, no se ven esas familias por la calle. Pero hemos tenido suerte, acuden a un colegio católico que está a doce bloques andando. Se han integrado muy bien y el mayor está ya en la high school. El fin de semana vamos todos a Central Park a montar en bici o a correr”, relata antes de dejar claro que, de momento, no hay teléfonos móviles ni tablets para los pequeños de la casa. Mejor que jueguen entre ellos.

Raúl, retirado y recién nombrado country manager de la Liga Profesional de Fútbol en EE UU, cuenta las presiones que está recibiendo para entrenar, pero ese proyecto tendrá que esperar. “Me lo dicen, me quieren empujar. Necesito mi tiempo. Mi vida ha sido tan clara, ahora tengo que pensar, ver si echo de menos competir. Tengo un proyecto de formación, aprender lo que rodea al fútbol: dirección deportiva, negocio. Es un periodo de hacer cosas sin ninguna presión para decidir qué me gusta y en unos años regresar a Madrid”, argumenta.

Mamen relata cómo intentó apartarse de Raúl sin éxito cuando se conocieron a través de Guti y Álvaro, confiesa que no es demasiado partidaria de que sus hijos sigan los pasos de su padre. “Su padre ha puesto el listón tan alto que no lo tienen fácil. Les explico que es el sueño de millones de niños, que es una cuestión de probabilidad que lo consigan y que es una posibilidad lejana. Lo importante es que se centren en los estudios. La educación es lo que no te pueden quitar nunca”.

Hay niños de 20 años, de 25... y no te dan un curso para enseñarte a tener mucho dinero

Raúl habla también sobre sus errores y las cosas que no le gustan del fútbol: “Con 19 o 20 años tuve que dar una rueda de prensa porque decían que salía por la noche, que bebía... Tuve que sentarme ahí para decir que quería seguir siendo futbolista (...) Pero también a veces nosotros somos niños, hay niños de 20 años, de 25, no te dan un curso para enseñarte a tener mucho dinero, a poder comprarte lo que te da la gana, a que todo el mundo te alabe”.

Y todo el dinero que ha ganado no se le ha subido a la cabeza: “Yo tenía a mis padres. Y mi forma de ser. Soy un poco raro... No me gustan los coches ni los relojes, me gusta la vida, los pequeños detalles, dar un paseo, el contacto con la naturaleza, ir al cine, ver deporte, estar con los amigos y tomar una cerveza...”.

¿Y cómo se afronta tanta mudanza?, ¿cómo se lo explicaron a sus hijos? “Que por el trabajo de papá íbamos a tener otra experiencia. Que donde estuviéramos juntos, estaría nuestro hogar. El hogar no son los objetos, son las personas. En cada mudanza trato de llevar lo justo. La casa de Alemania la monté de Ikea, para no tener apego a las cosas. Lo único que me importa son las fotos de mi familia”, explica Mamen.