Las 7 claves del accidente de autobús en Tarragona

Las 7 claves del accidente de autobús en Tarragona

EFE

El choque entre un autocar y un turismo en la AP-7 a la altura de Freginals (Tarragona) a primeras horas de este domingo, que ha costado la vida a al menos 13 personas, es el cuarto accidente de tráfico más grave de los ocurridos en España desde el año 2000 en el que se ha visto implicado un autobús de pasajeros.

Desde el primer momento, las autoridades han señalado al "error humano" como causa del volantazo que dio el conductor hacia las seis de la mañana, y que le hizo saltar la mediana y chocar, en el carril contrario, con un turismo.

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Estas son las claves esenciales para entender lo ocurrido.

13 chicas de varias nacionalidades, en su mayoría estudiantes de Erasmus vinculadas a la Universidad de Barcelona, son las víctimas mortales del siniestro.

El accidente, ocurrido minutos antes de las seis de la mañana, se produjo cuando el conductor del autobús dio un giro brusco por causas que se desconocen, atravesó la mediana de la AP-7 y volcó, colisionando con otro vehículo, lo que ha provocado la muerte de estas 13 estudiantes; además, hay 28 heridos, nueve de ellos graves -se teme seriamente por la vida de uno de ellos-, mientras que otras 21 personas resultaron ilesas y fueron llevadas a un hotel de Tortosa para recibir asistencia psicológica.

Según los últimos datos ofrecidos por los consellers de Interior, Jordi Jané, y de Salud, Toni Comín, en estos momentos permanecen hospitalizados de 23 personas, de las que 5 están en el hospital de Amposta (Tarragona); 5 en Tortosa; 3 en el hospital Joan XXIII de Tarragona; 3 en Vinaroz (Castellón); 2 en Reus (Tarragona) y 5 en centros del área barcelonesa (Vall d'Hebron, Clínic, Bellvitge, Sant Pau y BarnaMútua).

El accidente se ha producido poco antes de las 6 de la mañana cuando volcó el vehículo de la empresa Autocares Alejandro, de Mollet del Vallès (Barcelona), que formaba parte de una expedición de cinco autobuses que llevaban a los estudiantes a Barcelona desde Valencia, donde habían asistido a la cremà de las Fallas. Esa caravana fue contratada por la Asociación European Students Network, organización de estudiantes en la que participan diversas universidades catalanas.

La Dirección General de Protección Civil de la Generalitat ha informado de que en el autobús viajaban estudiantes de Perú, Bulgaria, Polonia, Irlanda, Palestina, Japón, Ucrania, República Checa, Nueva Zelanda, Reino Unido, Italia, Hungría, Alemania, Suecia, Noruega y Suiza.

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El ministro de Interior, Jorge Fernández Díaz, que ha acudido al lugar del siniestro, ha confirmado que la principal hipótesis del accidente es "una causa humana indeterminada, pero más humana que técnica", al igual que el conseller de Interior de la Generalitat, Jordi Jané, que la ha achacado, inicialmente, a "un error humano".

Horas antes, esa misma tesis era la defendida por el president de la Generalitat, Carles Puigdemont, que igualmente se ha desplazado a Tarragona para interesarse por lo ocurrido.

El conductor, que está en buen estado de salud y pasará la noche en comisaría para declarar mañana como investigado, ha dado negativo en las pruebas de alcoholemia y drogas. Ni el tacógrafo ni los papeles del vehículo presentaban ninguna anomalía. 23 testigos han prestado ya declaración ante el juez, a la espera de la versión de los hechos que dé el profesional.

El chófer tiene una experiencia de 17 años en Autocares Alejandro y sin ningún siniestro registrado en ese tiempo, según ha explicado a EFE fuentes de la empresa. El autocar cumplía todas las normas de seguridad, había pasado la ITV cuando le tocaba y era un vehículo de unos tres años de antigüedad de la marca Mercedes.

Frente a la postura mantenida por las administraciones nacional y autonómica, el alcalde de Freginals, Josep Roncero -una de las primeras autoridades que se ha desplazado hasta el lugar del suceso-, ha señalado que el lugar donde ha tenido lugar el accidente es un habitual escenario de accidentes. "Este es un punto negro. Es una línea recta y siempre que ha habido accidentes se han producido en este punto", ha denunciado.

Esta opinión coincide con la Asociación Estatal de Víctimas de Accidentes DIA, que ha detallado que el siniestro se ha producido en uno de los 1.314 tramos catalogados por la Dirección General de Tráfico (DGT) como puntos negros: el kilómetro 333, ubicado dentro del tramo de especial peligrosidad que abarca del kilómetro 330 al 340.

En cuanto a la alta siniestralidad que ha apuntado este alcalde justamente en este punto de la AP-7, la Generalitat ha querido subrayar que esta "es una vía de gran capacidad en horas en las que no había acceso de tráfico. Analizaremos debidamente qué ha pasado y por qué", ha dicho el consejero de Interior, Jordi Jané.

Las autoridades catalanas han confirmado que los 13 cuerpos están ya en un tanatorio, pero las identificaciones de los cuerpos deberán esperar al menos a mañana lunes. Al parecer, varias de las víctimas mortales carecían de documentación alguna y, además, otras cambiaron de asiento e incluso de autobús para emprender el regreso a Barcelona, con el fin de ir con determinados grupos de amigos.

17 forenses están trabajando en esta identificación, mientras que los servicios consulares de los países a los que pertenecían las jóvenes están en contacto con sus familias para lograr muestras de ADN con las que cotejar los restos. Ya se han logrado muestras de 12 personas.

No se descarta que los estudiantes que han sobrevivido tengan que hacer alguna ronda de reconocimiento de los cuerpos, ante la dificultas de que vengan los familiares desde lugares distantes.

La vía en la que han ocurrido los hechos ha estado cortada desde las 6 de la mañana en sentido sur, a su paso por Freginals. El flujo hacia el norte quedó totalmente restablecido a primera hora de la tarde. El sur se esperaba lograr a lo largo de la noche del domingo al lunes.

La Generalitat ha decretado dos días de luto y el presidente catalán ha suspendido el viaje que tenía previsto realizar a París, mientras que las banderas de la Universidad de Barcelona, donde estudiaban la mayoría de estudiantes que viajaban en el autobús, ondean a media asta en señal de duelo.

También los rectores de las universidades españolas (CRUE) han transmitido su "profundo pesar y cariño" a las familias de las víctimas, y han hecho extensivo el pésame a toda la comunidad universitaria.

Los principales líderes políticos y la Casa Real han mostrado su solidaridad con las víctimas.