IV Cumbre sobre Energía Nuclear: qué es y qué esperar
Este viernes es el día grande de la IV Cumbre de Seguridad Nuclear, que se celebra en Washington y a la que acuden líderes de más de cincuenta países y de organizaciones internacionales, como la ONU y el Organismo Internacional de Energía Atómica (OIEA). En esta ocasión, estará marcada por los retos que plantean Corea del Norte y el terrorismo a nivel global y porque es, además, la última liderada por el presidente de EEUU, Barack Obama.
LA CUMBRE DE OBAMA
Obama y Hollande antes de la cena de la Cumbre
La cita es relevante dado que La Cumbre de Seguridad Nuclear se celebra cada dos años desde 2010 por iniciativa de Obama, quien prometió al comienzo de su mandato convertir en una prioridad la no proliferación nuclear e instó a la comunidad internacional a avanzar hacia "un mundo libre de armas atómicas", durante un discurso en Praga en 2009.
Ahora, dado el panorama internacional, en el que la amenaza del Estado Islámico se ha convertido en protagonista, el líder estadounidense ha enfatizado que la cita se centrará en evitar que los materiales necesarios para construir un arma atómica caigan en manos de grupos terroristas.
Con una cena de bienvenida en la Casa Blanca, Obama ha inaugurado la Cumbre y previamente ha asegurado que su homólogo francés, François Hollande, ha "movilizado a la comunidad europea" en el combate al terrorismo. Ambos mandatarios han analizado formas de estrechar la cooperación bilateral en esa materia para evitar nuevos ataques como los de Bruselas y París.
LA AMENAZA TERRORISTA
Manifestación en Bruselas por la seguridad frente al terrorismo
En la misma línea que Obama se han mostrado otros líderes europeos, conscientes de la amenaza que se cierne sobre Occidente. El ministro del Interior belga, Jan Jambon, ha asegurado este viernes que las centrales nucleares "son un objetivo interesante para los terroristas", al tiempo que ha subrayado la necesidad de reforzar la seguridad en este tipo de instalaciones.
Es más, Jambon incluso ha asegurado que la posibilidad de un ataque contra centrales nucleares es "una problemática que obsesiona" a los estados. "Los terroristas pueden utilizar material nuclear para construir bombas. Los jefes de Estado quieren evitar una catástrofe", ha explicado, en declaraciones a la cadena de televisión RTL.
El ministro del Interior belga ha hablado de los atentados contra "centrales nucleares" pero también contra "materiales nucleares" y ha puesto como ejemplo el riesgo de ataques contra hospitales que tienen material nuclear, una posibilidad que analizan las autoridades belgas.
TENSIÓN CON PYONGYANG
Prueba de disparo de un nuevo tipo de cohete gran calibre
En plena inauguración de la cumbre, Corea del Norte ha disparado un misil antiaéreo de corto alcance al mar, el sexto lanzamiento de este tipo en un mes que se produce en mitad de la tensión en torno al régimen de Kim Jong-un por sus recientes pruebas nucleares y armamentísticas.
El Ejército Popular norcoreano ha lanzado desde la provincia nororiental de Hamgyong del Sur el misil, que ha volado unos 100 kilómetros hasta caer en aguas del mar del Este (mar de Japón), informó a Efe un portavoz del Ministerio de Defensa de la vecina Corea del Sur.
Se trata del sexto ensayo de misiles en un mes, ya que durante marzo Pyongyang llevó a cabo cinco lanzamientos de proyectiles balísticos de corto y medio alcance.
La nueva demostración norcoreana de fuerza militar ha llegado solo un día después de que los líderes de Estados Unidos, Corea del Sur y Japón reafirmaran en Washington su unidad contra los programas nuclear y de misiles norcoreanos.
LA GRAN AUSENTE: RUSIA
La cumbre está marcada por la ausencia de la otra gran potencia nuclear mundial, Rusia, que ha decidido no asistir en protesta por lo que considera una interferencia en el trabajo del OIEA.
"Creemos que la decisión de Rusia de no participar con una representación de alto nivel es una oportunidad perdida para ellos, por encima de todo. Lo único que están consiguiendo es aislarse", según ha declarado a la agencia Efe el asesor adjunto de seguridad nacional de Obama, Ben Rhodes, en una conferencia de prensa telefónica.
El Ministerio de Asuntos Exteriores ruso ya había anunciado en enero pasado que Rusia no acudiría a la cumbre, en protesta por lo que percibía como un intento de los organizadores de interferir en el trabajo del Organismo Internacional de Energía Atómica (OIEA).
Rusia, que posee un enorme arsenal nuclear, ha "cooperado" hasta ahora con Estados Unidos en los esfuerzos de no proliferación y de reducción de los riesgos que conllevan esos materiales, y la Casa Blanca confía en que siga siendo así, ha agregado Rhodes.
Por otro lado, Irán también será otra de las potencias que se ausente. Eso sí, será uno de los temas que se toquen durante la Cumbre sobre Seguridad Nuclear en Washington después de histórico acuerdo nuclear cerrado con EEUU.
