Italia aprueba la ley que regula las uniones civiles entre homosexuales

Italia aprueba la ley que regula las uniones civiles entre homosexuales

AFP

Viva l'amore! La Cámara de los Diputados de Italia ha aprobado la ley, impulsada por el Gobierno de Matteo Renzi, que regulará las uniones entre personas del mismo sexo, aunque sin contemplar su derecho de adopción.

La votación definitiva concluyó con 372 votos favorables, 51 contrarios y 99 abstenciones.

La aprobación de la ley fue celebrada con un aplauso en la cámara baja por miembros del Partido Demócrata (PD), que lidera Renzi, quien precisamente al principio de la jornada había afirmado que hoy iba a ser "un día de fiesta para mucha personas".

"Estamos muy contentos, es un día de fiesta para todos los italianos. (...) Hemos dado una respuesta después de años no solo en relación a los derechos sino a los sueños y expectativas de tantas personas", ha declarado la ministra para las Reformas Constitucionales, Maria Elena Boschi, a la salida de la Cámara de los Diputados.

SIN DERECHO A ADOPTAR

Después de meses de largos debates parlamentarios y numerosas enmiendas presentadas, Italia suma ahora a su ordenamiento jurídico una ley que concederá a las parejas homosexuales las mismas obligaciones y la mayor parte de los derechos de los matrimonios convencionales, aunque sin el derecho de adoptar niños.

El proyecto fue iniciativa de la senadora del PD, Mónica Cirinnà, y contemplaba inicialmente el reconocimiento legal de las uniones entre personas del mismo sexo y también el derecho de la pareja a adoptar el hijo natural de su compañero sentimental.

Sin embargo la supresión de este punto fue condición requerida en el Senado por el socio en el Gobierno de Renzi, Nuovo Centrodestra (NCD), para sacar el texto adelante y llegar a su tramitación final.

Las voces más críticas con el derecho de adopción sostenían que, de aprobarlo, incentivaría la gestación subrogada y el uso del vientre de alquiler.

La nueva ley tampoco incluye la obligación de las parejas homosexuales a guardarse fidelidad, una modificación también impuesta por el conservador NCD, que lidera el ministro del Interior italiano y exdelfin de Silvio Berlusconi, Angelino Afano.