Pfizer impide que sus productos se usen en las inyecciones letales

Pfizer impide que sus productos se usen en las inyecciones letales

REUTERS

La farmacéutica Pfizer no quiere que sus productos se utilicen en la ejecución de la pena de muerte y ha añadido nuevas trabas a a la elaboración de la inyección letal en Estados Unidos.

"Pfizer fabrica sus productos exclusivamente para mejorar y salvar la vida de nuestros pacientes", ha indicado la portavoz de la compañía, Rachel Hooper. "Nos oponemos firmemente al uso de cualquiera de nuestros productos en el proceso de inyección letal para aplicar la pena de muerte", ha subrayado.

Para ello, Pfizer, una de las compañías más importantes del sector en todo el mundo, ha decidido poner un obstáculo más a la elaboración de la inyección letal en Estados Unidos y ha anunciado que reforzará las restricciones a sus medicamentos, de manera que se pueda asegurar de que los estados que aún ejecutan penas de muerte no los utilizan como componentes de su producto final.

Si bien la compañía ya había puesto en marcha algunas restricciones para evitar que sus medicamentos acabara en las prisiones donde se ejecuta la pena capital, la compañía es consciente de que es complicado llegar a controlar el camino que recorren sus productos.

Por eso, su nueva política buscará, con un sistema de supervisión, asegurarse precisamente de que los centros penitenciarios de los estados en los que aún es legal la pena de muerte no obtengan sus productos para poder llevar a cabo la ejecución por inyección letal, tal y como informa el diario estadounidense The Washington Post.

LA COSA SE COMPLICA

Este cambio de política llega en un momento en el que los estados que aún ejecutan penas de muerte a través de inyección letal han tenido que buscar opciones para fabricar el producto, debido a las fuertes carencias de fármacos en Estados Unidos, provocadas por la prohibición, por parte de la Unión Europea, de exportar medicamentos destinados a ejecuciones.

El director ejecutivo del Centro de Información de Pena de Muerte, Robert Dunham, ha asegurado que se trata de cambios significativos. "Lo que hoy ha hecho Pfizer deja claro ante el resto de la comunidad farmacéutica que está comprometida con que sus medicamentos no se usen de manera negligente", ha explicado.

La carencia de medicamentos -con una veintena de compañías poniendo las mismas trabas que Pfizer- ha provocado que algunos estados detengan durante meses las ejecuciones; en el caso de Ohio, incluso hasta un año. Esta nueva política, que va en esta línea de impedir las ejecuciones, añade nuevas complicaciones a los estados que aún mantienen vigente la pena de muerte en sus legislaciones.

Se están buscando alternativas en Asia, sobre todo en La India, pero los servicios aduaneros de EEUU han bloqueado los pedidos porque no cuentan con test suficientes (no diremos seguridad, que para matar son) como para comercializarse en su país.