La afición brasileña la toma con Gasol: "Vete a tomar por c..."

La afición brasileña la toma con Gasol: "Vete a tomar por c..."

AFP

La afición brasileña sigue con pasión a sus equipos en los Juegos, tanto que a veces roza actitudes poco olímpicas, como ocurrió este martes en el partido de baloncesto que enfrentó a Brasil y a España, en el que los hinchas locales mandaron al español Pau Gasol, literalmente, "a tomar por culo".

"Vai tomar no cu" (Vete a tomar por culo), se despachó la afición brasileña contra el estrella de la NBA, cuando el español se preparaba para lanzar uno de sus tiros en la segunda mitad del encuentro.

De poco le sirvió a Gasol ser el mayor anotador del partido ante un público que sólo era capaz de ver que el jugador español era el mayor obstáculo para el avance de la selección brasileña.

Aunque Gasol centró buena parte de la "presión" de la hinchada local, los aficionados brasileños no se cohibieron tampoco a la hora de "regalar" silbidos atronadores, sonoros abucheos y pataletas que hacían temblar el pabellón a los jugadores españoles cada vez que se intentaban encestar.

"NO ME SABE BIEN"

Tras un partido de "infarto" que terminó con una apretada victoria para el equipo local, 65-66, el pabellón, con capacidad para unas 15.000 personas, se vino abajo al grito de "Brasil, Brasil".

La "pasión" de los aficionados brasileños no pareció molestar a la selección española. "Seguramente Gasol ni lo entendió", comentó después a la prensa el alero Rudy Fernández.

Para el brasileño Marcus Vinicius Marquinhus, sin embargo, no es un tema tan menor. "Entiendo cómo apoya la afición, pero no me sabe bien", admitió el jugador.

"Quiero disculparme en nombre de la afición brasileña", agregó, antes de subrayar que el español es uno de los grandes del baloncesto.

El baloncesto no es el único deporte en el que los brasileños se han dejado llevar y se han comportado como habitualmente lo hacen en los estadios de fútbol durante la liga nacional, con una "pasión" que a veces choca con el espíritu olímpico.

También en disciplinas como el rugby, en la que es el respeto por el contrario en las gradas es una regla no escrita, la hinchada brasileña ha "presionado" a los adversarios con abucheos y pitadas.

"Es una cosa habitual", apuntó el entrenador de la selección brasileña de baloncesto, el argentino Rubén Magnano, convencido de que no debe tomarse como un agravio para los equipos visitantes.

"Cuando Brasil tiene enfrente a un rival de prestigio, se tira encima, pero todo termina cuando el juego acaba", concluyó.