Una mujer de Estados Unidos trata de demostrar desesperadamente que no está muerta

Una mujer de Estados Unidos trata de demostrar desesperadamente que no está muerta

GETTY

Debido a un error burocrático, una mujer de Utah, Estados Unidos, ha sido declarada muerta. El gobierno estadounidense trata ahora de recuperar la totalidad de la pensión y pagos médicos que ha recibido desde julio de 2014, según el diario The Independent

En agosto de 2014 el gobierno recibió un certificado de defunción de Bárbara Murphy. Este certificado estaba vinculado a su cuenta de la seguridad social. Ajena a todo, la mujer de 64 años continuó con su vida como hasta ahora había hecho.

La alarma saltó cuando Murphy intentó pagar en un restaurante con su tarjeta de crédito y ésta fue denegada. Cuando acudió a su banco para solucionarlo, fue informada de la cancelación de sus cuentas por defunción. "señora, está usted muerta".

La agencia de noticias KSL ha hablado con ella y asegura que se encuentra en perfecto estado. En la entrevista Murphy cuenta que acudió a las autoridades para subsanar el error pero no pudo conseguir una cita, ya que su número de la seguridad social no era válido. Todo eran trabas. Ahí comenzó un calvario para tratar de demostrar que estaba viva.

AQUÍ EL MUERTO VIVIENTE

Cuando se cumplían 25 meses de su supuesta muerte, el gobierno exigió a su familia el pago de la pensión - miles de dólares- que continuaba percibiendo. La ayuda de su banco de toda la vida fue decisiva. Fueron ellos quienes congelaron las cuentas para que el gobierno no recuperara los pagos de la seguridad social.

Ahora que ha pasado todo y Bárbara vuelve a estar en el mundo terrenal, se lo toma con filosofía e incluso contesta al teléfono como : " Aquí el muerto viviente".

En declaraciones a KSL un portavoz regional de la SSA - la seguridad social estadounidense- explicó que este error es extremadamente raro: "Cada año gestionamos unos 2,8 millones de fallecimientos". "Nos basamos en la información que nos aportan los miembros de las familias, funerarias, instituciones financieras, agencias federales...". "Puede que nunca sepamos como ha sucedido".

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