¿Pantalón o vestido? ¿Por qué no los dos a la vez?
¿Por qué renunciar a algo si lo puedes tener todo? Algo así han debido pensar simultáneamente diseñadores, celebrities y estrellas de street style, porque la inesperada mezcla de vestido y pantalón se ha convertido en tendencia entre las invitadas a los desfiles para la primavera de 2017.
Ellas no son las únicas: sobre las pasarelas también se han visto propuestas que combinan las dos prendas, como en las colecciones de Balmain, Stella McCartney o Vionnet.
La sorprendente tendencia ha hecho un tímido acto de presencia en los escaparates de las grandes cadenas, índice certero de que tenemos mezcla para rato. Éstas son las claves para llevarla:
1. Puedes jugar todo lo que quieras con el largo del vestido, pero para iniciarte te recomendamos una altura midi. Es decir, que el bajo llegue hasta media pierna.
2. Los pantalones no deberían ser ni muy pitillos, ni campana. El corte ideal es el recto.
3. El largo del pantalón debería ser pesquero; si no, arremángalo o combínalo con botines.
4. Si te preocupa el efecto saco de patatas, busca vestidos que se ciñan a la cintura, tipo batín.
5. ¿Lo más sencillo? Mezclar cualquier vestido con vaqueros.
6. Si eres más atrevida, lleva la tendencia al extremo y prueba con vestidos de tul o lenceros.
7. La combinación funciona hasta en ocasiones especiales, y si no que se lo digan a Emma Watson (Globos de Oro 2015) o a Sarah Hyland (en los Emmy 2016).
