Dieselgate: primera sentencia contra VolksWagen en España

Dieselgate: primera sentencia contra VolksWagen en España

REUTERS

Un juez de Valladolid ha firmado la primera condena en España contra el fabricante alemán por el fraude de las emisiones de CO2. La alemana deberá indemnizar con 5.006 euros, el 10% del precio del vehículo, al comprador de un modelo Q5 en 2013, y uno de los casi 700.000 coches afectados en España por la instalación de un software fraudulento que permite manipular a la baja las emisiones contaminantes durante la conducción real.

En la sentencia, el juez considera que el grupo Volkswagen engañó a las autoridades de control en un bien común como es el medio ambiente y dice de él que ha infringido los deberes de buena fe que supone la pérdida de confianza del consumidor.

Para el magistrado, resulta “razonable” que el consumidor no quiera asumir una reparación efectuada por la propia marca cuando esto supone una manipulación del motor verificada “con secretismo y sin que conste acreditado sin lugar a duda que no afectará a las prestaciones del vehículo”.

Esta es la primera sentencia contra la marca y favorable al consumidor de las cinco demandas civiles presentadas en los juzgados nacionales.

Creo que la industria europea del automóvil debería cuidar de los consumidores europeos

Mientras en España la Audiencia Nacional espera dictar sentencia en junio de 2017, la Unión Europea busca alcanzar un acuerdo con la marca similar al cerrado con Estados Unidos, un acuerdo que se retrasa. El vicepresidente de la Comisión Europea Maros Sefcovic ha afeado este miércoles al grupo automovilístico alemán Volkswagen que ofrezca una compensación económica a sus clientes en Estados Unidos por el fraude en las emisiones de sus motores diésel, mientras que a las víctimas europeas del mismo software manipulado sólo les dedique "una disculpa".

"Creo que la industria europea del automóvil debería cuidar de los consumidores europeos", ha dicho Sefcovic en una rueda de prensa en Bruselas, en donde ha criticado las "diferencias" en el trato ofrecido a los clientes europeos y norteamericanos.