El día en el que la Justicia española estuvo en el punto de mira

El día en el que la Justicia española estuvo en el punto de mira

REUTERS

"La Justicia es igual para todos; las sentencias, no", rezaba a modo de premonición la viñeta de El Roto de este jueves.

Porque, cuando el pasado viernes la Sección Primera de la Audiencia Provincial de Baleares condenó a seis años y tres meses de prisión a Iñaki Urdangarin por el caso Nóos, muchos pensaron que el ex Duque de Palma y marido de la infanta Cristina terminaría entre rejas más temprano que tarde.

Sin embargo, apenas seis días después, la misma Audiencia que dictaba esa condena, decretaba la libertad provisional sin fianza para Urdangarin, para quien la Fiscalía Anticorrupción pedía prisión bajo fianza de 200.000 euros.

El cuñado del rey salía así a pie y mochila al hombro de la Audiencia Provincial camino de Suiza, donde el tribunal le ha permitido residir siempre y cuando comparezca el día 1 de cada mes ante la autoridad judicial competente en su lugar de residencia en Ginebra.

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La indignación en las redes sociales ante esta decisión del tribunal ha llegado tanto por parte de usuarios anónimos como de políticos, muchos de los cuales se han acordado de casos como el del rapero Valtonyc, condenado este miércoles a casi cuatro años de cárcel por una canción sobre el rey.

"Mensaje: sale a cuenta robar", se indignaba también desde Facebook la alcaldesa de Barcelona, Ada Colau, que ha criticado la doble vara de medir que, afirma, tiene a veces la Justicia en España.

HASTA LOS CORRUPTOS SE QUEJAN

Hasta corruptos encarcelados como Pablo Crespo, exsecretario de Organización del PP de Galicia, han solicitado a la justicia que apliquen para ellos el mismo rasero que con Urdangarin.

En concreto, la defensa de Crespo ha reclamado al Tribunal Superior de Justicia de Valencia que le permita depositar 200.000 euros, la misma fianza que la Fiscalía reclamaba a Urdangarin para evitar la prisión, donde Crespo se encuentra desde mediados de febrero por el 'caso Gürtel'.

El abogado de Crespo considera que existe un "trato dispar" y un "agravio comparativo" entre la situación de su cliente y el marido de la infanta.

INTIMIDACIÓN A LOS FISCALES ANTICORRUPCIÓN

La decisión de la Audiencia de Palma coincide con la noticia con la que ha despertado la actualidad informativa de este jueves: la denuncia de presiones e intimidaciones del fiscal superior de Murcia, Manuel López Bernal, encargado de investigar al presidente murciano, Pedro Antonio Sánchez, por corrupción en el caso Auditorio.

En declaraciones a la Cadena SER, López Bernal ha asegurado que, durante el último año, han entrado "delincuentes profesionales para llevarse información sensible de la lucha contra la corrupción” al menos dos veces en casa de su colega de instrucción y otra en la de un inspector de Hacienda que ha colaborado en el caso del presidente de Murcia.

"Sólo se llevaron su ordenador y su tarjeta del móvil. No han querido ocultar de qué se trataba, no se llevaron dinero para disimular", ha denunciado el fiscal. Lopez Bernal ha lamentado que, a pesar de haber informado de diversos incidentes durante los últimos años tanto a la Delegación del Gobierno en Murcia como a la Fiscalía General del Estado, "no se le está dando la importancia que tiene, no sé si se están llevando a cabo las investigaciones pertinentes".

López Bernal ha dicho no saber "de dónde salen esas intimidaciones" pero ha advertido de que "si estas cosas siguen pasando, dentro de unos años nos encontraremos con que nadie quiere investigar la corrupción". "Creo que la mayoría de los fiscales anticorrupción sienten una cierta desprotección", ha afirmado.

OTRAS DOS SENTENCIAS IMPORTANTES

Casualidad o no, la decisión de la Audiencia de Palma ha coincidido con otras dos sentencias de gran calado mediático.

Por un lado, la condena a 70 años de cárcel a Antonio Ortiz, conocido como el pederasta de Ciudad Lineal, por parte de la Audiencia Provincial de Madrid.

Y por otro, la sentencia de la Audiencia Nacional contra los expresidentes de Caja Madrid Rodrigo Rato y Miguel Blesa, a los que ha condenado a cuatro años y medio de prisión y a seis años de prisión, respectivamente, por el caso de las tarjetas black.

Aunque los impulsores del juicio contra los desmanes de Rato en Caja Madrid han celebrado la condena...

...otros, como el hasta ahora 'número dos' de Podemos, Íñigo Errejón, consideran que la justicia sigue aplicando de manera desigual sus penas en función de quién sea el condenado:

Lo que muchos se preguntan ahora es si, como en el caso de Urdangarin, la justicia mantendrá en libertad a Blesa y a Rato o si impondrá prisión para los dos condenados.