Corea del Norte prohíbe salir de su territorio a los malasios y Malasia responde haciendo lo mismo
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Corea del Norte prohíbe salir de su territorio a los malasios y Malasia responde haciendo lo mismo

Se han enzarzado en una guerra diplomática por la muerte de Kim jong-Nam.

Un cámara graba la fachada de la Embajada de Corea del Norte en Kuala Lumpur (Malasia).EFE

Corea del Norte ha prohibido abandonar su suelo a todos los malasios hasta que el caso del asesinato del hermano de Kim jon-Un tenga "una resolución adecuada". Malasia ha respondido haciendo lo mismo en su territorio.

La Cancillería norcoreana ha informado a la embajada de Malasia en Pyongyang que no permitirá salir a ningún malasio hasta que la seguridad de sus ciudadanos y personal diplomático en el país del sureste asiático "no esté totalmente garantizada mediante la resolución adecuada del caso".

En respuesta, el viceprimer ministro malasio, Ahmad Zahid Hamidi, ha anunciado que su país hará lo propio con los diplomáticos y trabajadores de la embajada norcoreana en Kuala Lumpur, una decisión de la que está exento el personal civil.

"El Ministerio del Interior, a través del Departamento de Inmigración, ha emitido una directiva inmediata para que a ningún funcionario o empleado de la embajada de Corea del Norte se les permita salir del país", ha señalado Hamidi, quien también alberga la cartera de Interior.

Malasia, que tenía un acuerdo recíproco de exención de visados con Corea del Norte, ha confirmado que 11 de sus ciudadanos se encuentran actualmente en el hermético estado coreano, de los cuales tres son personal de la embajada, seis familiares y dos trabajadores de la ONU.

Los anuncios llegan después de que Malasia declarara persona non grata al embajador de Corea del Norte y tras saberse que tres norcoreanos solicitados para la investigación de la muerte de Kim jong-Nam se refugian en su embajada y que la legación de Pyongyang no está colaborando con las pesquisas.

Kim Jong-nam murió el 13 de febrero tras ser asaltado en el aeropuerto de Kuala Lumpur por dos mujeres -detenidas e imputadas- que le frotaron la cara con el agente nervioso VX.

Pyongyang sostiene que la muerte fue causada por un ataque cardíaco y acusa a Malasia de conspirar junto a Estados Unidos y Corea del Sur, dos países con los que se mantiene en guerra desde 1950.