Muere un bebé por la dieta que le pusieron sus padres

Muere un bebé por la dieta que le pusieron sus padres

Tenía 7 meses y pesaba 4 kilos.

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Lucas era un niño que murió en junio de 2014. Tenía 7 meses y pesaba 4 kilos, menos de la mitad de lo que debería pesar un niño de su edad. Sus padres, de la ciudad belga de Bereven, eran dueños de una tienda de productos naturales y, según cuenta el diario Metro, pusieron a Lucas una dieta que incluía leche de quinoa, pese a que los doctores advierten de que no es adecuada para un bebé.

Anteayer comenzó el juicio contra los padres, a los que la Fiscalía culpa de la muerte de Lucas: "Los padres diagnosticaron que el bebé era intolerante al gluten y que tenía alergia a la lactosa. Pero no había ningún médico que tuviera un informe sobre Lucas".

También acusan a los padres de llevar a Lucas a un médico homeopático cuando el bebé se moría de hambre en lugar de acudir al hospital más cercano. "Nunca lo llevamos al médico porque nunca notamos nada raro", se ha defendido el padre. La madre ha explicado en el juicio: "Algunas veces, Lucas ganaba un poco de peso y otras, lo perdía. Nunca quisimos que se muriera".

Según la abogada de los padres, ellos pensaban que Lucas tenía un problema al comer. "Le daban calambres cuando le daban el biberón y los padres probaron alternativas: leche de avena, de arroz, sémola, de quinoa. Todos esos productos también se venden en su tienda".

Según el diario The Independent, la autopsia demostró que el bebé estaba deshidratado y con el estómago completamente vacío cuando murió.