Las impresionantes fotos de las tribus de Kenia salvando a crías de elefante

Las impresionantes fotos de las tribus de Kenia salvando a crías de elefante

“Cuidamos de los elefantes y los elefantes cuidan de nosotros”.

Ami Vitale/National Geographic

Si los miembros de la tribu samburu del norte de Kenia se hubieran encontrado a una cría de elefante herida o abandonada hace un año, probablemente la hubieran dejado morir. Pero actualmente, con el apoyo del Refugio para Elefantes Reteti, la población local está trabajando para salvar a los elefantes en peligro.

La fotoperiodista Ami Vitale viajó al orfanato de crías de elefante para documentar a través de National Geographic la relación de la comunidad con estos animales.

Reteti abrió en agosto como parte de una red de grupos comunitarios de la región que trabajan para fomentar el desarrollo sostenible y la conservación de la fauna. Los cuidadores de elefantes tratan de rehabilitar a las crías de elefantes heridas y de reunirlas con su manada siempre que es posible.

Los elefantes son "ingenieros del ecosistema", señala Vitale. Se alimentan de arbustos y nivelan los árboles pequeños, lo cual favorece el crecimiento de las hierbas y atrae a otros animales que comen pasto.

No obstante, los cazadores furtivos que buscan el marfil han mermado la cifra de elefantes: la población de elefantes africanos ha caído en más de 110.000 ejemplares en la última década, según la Unión Internacional para la Conservación de la Naturaleza. Al menos 33.000 elefantes son asesinados cada año por sus colmillos.

En el pasado, los miembros de las tribus locales temían a los elefantes y no estaban interesados en salvarlos, según explica Vitale. En cambio, ahora —sobre todo gracias a reservas como Reteti— la gente del pueblo trabaja para proteger a los aproximadamente 6.000 elefantes que viven entre ellos.

"Cuidamos de los elefantes y los elefantes cuidan de nosotros", contó a Vitale uno de los cuidadores de Reteti. "Ahora hay una relación entre nosotros".

A continuación puedes echar un vistazo a las impresionantes fotografías de Vitale. Puedes leer su historia aquí.

  • Ami Vitale/National Geographic Los elefantes no son muy pacientes a la hora de comer y esto se hace evidente en el momento en que Amos Leleruk entra con la comida. En la naturaleza, el destete normalmente tiene lugar cuando los elefantes tienen entre 5 y 10 años.
  • Ami Vitale/National Geographic Joseph Lolngojine, un guerrero samburu convertido en cuidador de elefantes, vigila a Kinya. Momentos después de sacar esta foto, se decidió llevarla al santuario para intentar salvarla.
  • Ami Vitale/National Geographic En esta foto se ve cómo cargan a Sosian, de 15 meses y sedado, en un vehículo adaptado especialmente para su transporte al santuario. Lo trajeron cuando su madre fue encontrada muerta por heridas de bala. El equipo de Reteti se asegura de que solo se lleva a huérfanos y no a los pequeños abandonados temporalmente.
  • Ami Vitale/National Geographic Mike Learka coge un biberón con leche de fórmula mientras Naomi Leshongoro (a la derecha) vacía uno en una boca hambrienta. En la naturaleza, los elefantes salvajes pueden suponer una amenaza para los humanos y sus propiedades. Tradicionalmente, los samburu los han evitado o ahuyentado.
  • Ami Vitale/National Geographic Mathew Mutinda, veterinario que trabaja con el Kenya Wildlife Service, se agacha sobre Mugie, de 18 meses, que todavía está sedado tras su rescate. Su madre murió por los disparos que recibió durante un conflicto con personas. Mugie fue transportada en avión hasta una pista de aterrizaje cercana al santuario y posteriormente la llevaron en una furgoneta a Reteti.
  • Ami Vitale/National Geographic Los guerreros samburu encontraron a esta cría atrapada en un pozo cavado. Como la manada no volvió a por ella, el equipo la llevó a la reserva de elefantes. La cría, llamada Kinya, era muy querida entre los cuidadores, como Rimland Lemojong (en la foto). Pese a todo, murió al cabo de unas semanas.