Cómo mantener la salud emocional ante noticias como el atentado de Barcelona

Cómo mantener la salud emocional ante noticias como el atentado de Barcelona

Afrontarlo de un modo u otro depende de uno mismo.

Cuando los medios publican noticias trágicas, como el atentado perpetrado este jueves en Barcelona, con al menos 12 muertos y más de 50 heridos, o el ataque de Cambrils (Tarragona) con siete heridos es habitual sentirse abrumado, angustiado y muy pesimista. La mayoría de la gente está pendiente de toda esa información, pero no debería perder de vista el impacto que tiene en su propia salud.

Según declaraciones del doctor Mark Williamson a la edición de Reino Unido del HuffPost, mantener la salud emocional no consiste en vendarse los ojos ante estas tragedias, sino en saber cómo afrontarlas. Cuidar de uno mismo no solo es fundamental en la vida diaria, también es importante para poder apoyar activamente a aquellos que lo necesitan. Es normal estar triste cuando otras personas han sido sacudidas por un ataque como el de Barcelona, pero existen formas para mantener la compostura en esas situaciones.

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Reducir el uso de las nuevas tecnologías

Según Cal Strode, alto directivo de la institución de salud mental Mental Health Foundation, "aunque es importante mantenernos informados e intentar ayudar, también es importante no consumirnos y agobiarnos con estas noticias". También menciona el "síndrome del mundo cruel", acuñado por el teórico de la comunicación George Gerbner en su "teoría del cultivo": "Cuanto más tiempo pase la gente viendo noticias o 'viviendo en el mundo de la televisión', más probabilidades tienen de acabar pensando que el mundo es intimidante y despiadado, extendiendo su miedo y su ansiedad entre quienes le rodean".

Cal Strode explica que aunque siempre hemos tenido acceso a las noticias en la televisión o en el periódico, ahora existen más vías y estamos mucho más conectados que nunca a las tragedias: "En la actualidad, con los móviles y las redes sociales, estamos conectados a tiempo real con todas las tragedias que van sucediendo, por lo que es mucho más difícil mantener unos límites y tomarnos un respiro cuando las noticias nos agobian".

No es una teoría aislada. La doctora Laura Thomas, asesora psicológica y experta en adicciones tecnológicas, opina de forma similar: "Estar conectados siempre a las redes sociales y a las noticias hace que nos sintamos informados, más integrados en este mundo y parte de una comunidad mucho mayor, pero solo nos llegan determinadas versiones de los hechos, por lo que, en realidad, solo comprendemos una parte de la realidad".

En ocasiones, las noticias solo sacan a la luz historias tristes, que son las que acaban circulando por las redes sociales: "El alarmismo vende mucho. Provoca la activación de la amígdala [la parte del cerebro encargada de las emociones y los instintos de supervivencia] y hace que estemos siempre alerta en busca del peligro. Acabamos pensando más en las tragedias, hablando más y prestándoles aún más atención, lo que nos va agotando física y emocionalmente".

Intentar mantener la perspectiva

También hay noticias positivas entre la marea de noticias trágicas, como la historia del taxista marroquí que llevó gratis a una mujer hasta su casa desde La Rambla. Para contrarrestar el efecto de las noticias tristes, la doctora Thomas recomienda "buscar también historias de superación y unidad". También señala la importancia de estar en contacto con los seres queridos en la vida real y de reducir el tiempo invertido leyendo noticias o navegando en redes sociales.

El doctor Mark Williamson, por su parte, añade que es necesario mantener una perspectiva equilibrada cuando las noticias se llenan de tragedias: "Sí, suceden muchas cosas horribles a diario, pero el mundo también está lleno de cosas buenas, desde un nuevo avance científico hasta los más pequeños gestos de bondad. Saber llevarlo no consiste en fingir que las cosas van bien cuando no es cierto, pero centrarte demasiado en lo negativo no es sano, y más cuando no está en nuestra mano cambiar lo sucedido. Lo mejor que podemos hacer es abordar el problema desde un punto de vista optimista, aceptando cómo son las cosas, pero sin olvidar que siempre hay esperanza, que todo puede ir (y muchas veces va) a mejor".

No dejar de cuidar de uno mismo

El doctor Williamson recuerda que hay un montón de pequeñas prácticas que pueden ayudar a lidiar con el agobio de las tragedias. "Primero, lo básico: tomamos mejores decisiones, ayudamos más a los demás y nos recuperamos antes de las dificultades cuando respetamos nuestras horas de sueño y hacemos algo de ejercicio, aunque sea un paseo para tomar el aire. Seguiremos siendo incapaces de cambiar muchas de las cosas que suceden, pero afrontar los problemas de un modo u otro es decisión nuestra. Por ejemplo, podemos pedir ayuda, podemos estar más atentos a las buenas noticias y podemos mostrar más amabilidad hacia los demás y hacia nosotros mismos", señala.

Algo aún más importante quizás sea atreverse a compartir las preocupaciones y los sentimientos con los seres queridos en busca de su apoyo. Para quien no se sienta cómodo tratando estos temas con los seres queridos, Cal Strode recomienda buscar ayuda profesional.

Este artículo fue publicado originalmente en el 'HuffPost' Reino Unido y ha sido traducido del inglés por Daniel Templeman Sauco.