El motivo por el que el estrés provoca estreñimiento y diarrea

El motivo por el que el estrés provoca estreñimiento y diarrea

"El estrés acentuará tu propensión habitual".

A todo el mundo le ha pasado: tienes dentro de poco una entrevista de trabajo, una presentación o mil cosas que hacer en muy poco tiempo. Entonces lo notas: o estás estreñido o tienes que ir corriendo al baño. Y así empieza a irse el día a la m...

Lidiar con la ansiedad ya es duro y, si encima te toca luchar también contra tus intestinos, es normal querer tirar la toalla ese día. Sin embargo, según indica un informe de la revista de salud Self, tener diarrea o estreñimiento es muy habitual cuando sufres estrés. Pero el hecho de que sea muy habitual no significa que no se pueda evitar en esos días en los que más necesitas que todo vaya bien.

Según el doctor Staller, el motivo por que el notas el estrés en el estómago es porque el cerebro y las tripas están en constante comunicación.

“El sistema gastorintestinal tiene muchas terminaciones nerviosas y es ‘el otro órgano del sistema nervioso’ junto con el cerebro. El cerebro puede influir en el sistema gastrointestinal y viceversa”.

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Cuando estás de los nervios, el cerebro provoca espasmos a los intestinos, según informa la revista Self: "Si los espasmos están muy generalizados, el colon se contrae entero y todo fluye muy rápido, provocando diarrea. Si los espasmos están concentrados en una zona concreta, pueden retener todo y agravar así el estreñimiento".

Sin embargo, aunque el estreñimiento es preocupante (y un suplicio para todos aquellos que saben lo que es estar sentados en la taza del váter para intentar que salga algo), la diarrea es un síntoma mucho más frecuente del estrés.

Si eres propenso a sufrir diarrea, aún tienes más papeletas de sufrirla cuando estés estresado o disgustado, señala Self. "El estrés acentuará tu propensión habitual", resume el doctor Staller.

Tomar alimentos con alto contenido en grasas y beber grandes cantidades de té y café tampoco ayuda demasiado a combatir el estrés. Algunas comidas, como el chocolate, pueden estimular tus tripas y, si además estás estresado, el resultado en el baño no te gustará.

Si te notas estresado o con ansiedad, trata de evitar comidas y bebidas que sabes que te van a sentar peor. En lugar de tomar eso, bebe mucha agua y come alimentos sanos, como las verduras. Así liberarás algo de tensión acumulada en los intestinos para que hacer de vientre no sea una experiencia tan traumática.

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La revista Self también sugiere recurrir a medicamentos que no necesiten prescripción médica, ya sean para tratar la diarrea o el estreñimiento. No obstante, si padeces el síndrome del intestino irritable (IBS) y este empeora con el estrés, Self recomienda tomar antidepresivos en dosis pequeñas para ayudar a tratar el sistema intestinal. Eso sí, consultando todas las posibles opciones con un médico antes de recurrir a ningún medicamento.

La meditación, el yoga y otras técnicas de relajación pueden servirte para aliviar las tripas cuando te encuentres mal.

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Si sabes de antemano que vas a tener un día estresante, la revista Reader's Digest recomienda empezar el día con un poco de meditación, ya que una mañana ajetreada solo te estresaría más.

"Despiértate 15 minutos antes de lo normal. Encuentra un lugar tranquilo para sentarte y cierra los ojos. Inclina la cabeza hasta que la barbilla te toque el pecho y respira, nota cómo cada inspiración te amansa el corazón y riega tu cerebro con oxígeno", aconseja Reader's Digest.

"Siéntete agradecido por poder pasar un día más con tus seres queridos. Proponte tener un día enriquecedor. Repítete a ti mismo que vas a ser positivo y que vas a mantener la calma pase lo que pase".

Si, aun así, no puedes evitar sentirte agobiado, Reader's Digestrecomienda deshacerte del estrés en tres minutos sentándote en el suelo, cerrando los ojos y respirando hondo.

Este artículo fue publicado originalmente en el 'HuffPost' Canadá y ha sido traducido del inglés por Daniel Templeman Sauco.