La Inteligencia Artificial es una gran aliada para potenciar un e-commerce

La Inteligencia Artificial es una gran aliada para potenciar un e-commerce

Sus beneficios se encuentran en el trato al cliente, la planificación logística, la optimización de los precios y la publicidad.

Inteligencia artificial 'e-commerce'Busakorn Pongparnit via Getty Images

*Artículo escrito por Jesús Orozco, experto en e-commerce y CEO de Consultoria.io

Antiguamente, los avances tecnológicos y técnicos tardaban decenas de años en lograrse y consolidarse, mientras que, en los últimos 30 años, los cambios, surgen en unos pocos años y cada vez hay revoluciones más rápidas que, gracias a la innovación y la tecnología, cambian el mundo de una forma radical. Por eso el e-commerce, nacido en la era digital, tiene que aprovechar todas las herramientas que tenga a su alcance y que vayan surgiendo para ser más eficiente y potenciar la venta online. 

La Inteligencia artificial, una tecnología que permite a las ‘máquinas’ —ordenadores, software, aplicaciones, robots, etc.— aprender, crear, planear y desarrollar un razonamiento sobre las tareas que hacen, es decir, ir desarrollando un conocimiento y unos automatismos en el desempeño de su trabajo. Evidentemente, puede aportar mucho al mundo de la venta online, solo hay que saber dónde implementarla.  

Algunas de las áreas en donde la implementación de esta tecnología está teniendo más éxito son los chatbots, que ayudan tanto a cerrar las ventas, como a la entrega de pedido y también al trato posventa con el cliente. Otros espacios en donde esta tecnología también triunfa son en la personalización de la recomendación de productos, basándose en lo que buscamos por internet,  la optimización de los precios de nuestras ofertas, así como en la logística o en la segmentación de nuestros clientes. 

La IA, por ejemplo, ayuda a crear una conversación personalizada según el cliente con el que esté tratando, basándose en su historial de compra y otras interacciones con otros compradores, para así poder darle el mensaje que más pueda calarle a la persona que quiera comprar nuestros productos. 

En un ejemplo más concreto, Amazon, el gigante por excelencia del e-commerce, con su tecnología de recomendación de producto, está consiguiendo hasta un 35% de sus ingresos, gracias al upselling y al cross-selling —vender productos que complementan o mejoran los que ya hemos comprado— que hace con la inteligencia artificial. 

No solo en el trato al cliente se encuentran los beneficios de esta tecnología. Como hemos visto con Amazon, también en las ventas, y es que la inteligencia artificial nos ayuda a mejorar muchas áreas. 

Tanto la publicidad de nuestros productos, dirigida a clientes que tengan búsquedas relacionadas o, incluso sin tenerlas, que ya hayan entrado en nuestra web, y con la ayuda de Facebook Ads y Google Ads, podemos potenciar más aún las ventas. También en otras áreas tan diferentes como la logística, en donde nos puede ayudar a dimensionar las nuevas colecciones correctamente para no quedarnos nunca sin stock, ni tener de más, y para poder realizar envíos más eficientemente, basándose en datos en tiempo real. 

Además de la logística y la publicidad, la inteligencia artificial también es muy útil en la optimización de los precios —saber cuándo y cuánto hay que descontar o rebajar—, en el servicio al cliente para todas las fases de la venta, etcétera. 

Ahora que ya sabemos los posibles beneficios de implementar la inteligencia artificial en nuestra plataforma, es necesario analizar de qué manera podríamos hacerlo de la mejor forma. 

En primer lugar, diseñar una estrategia para ver qué queremos hacer con ella, hasta dónde podemos llegar y si es conveniente que la usemos en según qué aspectos. Segundo, deberíamos centrarnos en los apartados en los que obtengamos un retorno y en los que los datos nos den una ventaja, para así ir aclimatándonos a esta tecnología e ir evolucionando poco a poco con ella. Probablemente el propietario del e-commerce no tenga mucho conocimiento sobre esta tecnología, así que le recomendaría buscar a una tercera persona o una empresa externa que ayude a implementarla gradualmente. Por último, no hay que estresarse, ya que esta implementación no tiene un efecto inmediato. Como he explicado anteriormente, esta tecnología se basa en aprender de las acciones que va recopilando, así que puede que tarde un tiempo en llegar al nivel que esperas de ella. 

No hay que olvidar que la inteligencia artificial que nos imaginamos puede no ser la que estamos buscando. Quizá la que necesitamos para nuestra empresa puede ser menos espectacular, pero nos ayudará en tareas cotidianas y necesarias como el uso de los datos que tenemos, tanto de nuestros clientes como de nuestro negocio.

Recopilando ideas, la inteligencia artificial es una herramienta que nos puede ahorrar muchísimo tiempo, costes, hacer nuestra plataforma más eficiente y lidiar con las tareas más tediosas de un negocio, ya que mediante el aprendizaje puede llegar a convertirse en un muy buen ‘asesor’. Tenemos que acoger y adoptar esta tecnología, ya que nos permitirá a todos dar el salto que necesitamos en nuestro negocio, pero debemos darle tiempo para recoger los frutos.