Del resentimiento al valor

Del resentimiento al valor

Tras una ruptura sentimental, el recuerdo de la persona amada puede ser una pesada carga que te deprima emocionalmente y te estanque. Todo depende del enfoque de tu recuerdo. Por ejemplo, si está teñido de odio y de ciertos deseos de venganza, tu visión de la realidad está enganchada a la cadena del resentimiento.

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Foto: Getty Images.

Tras una ruptura sentimental, el recuerdo de la persona amada puede ser una pesada carga que te deprima emocionalmente y te estanque. Todo depende del enfoque de tu recuerdo. Por ejemplo, si está teñido de odio y de ciertos deseos de venganza, tu visión de la realidad está enganchada a la cadena del resentimiento.

El resentimiento se define como la hostilidad, antipatía, aborrecimiento o aversión hacia una persona que nos ha causado un daño. Cuando el resentimiento habita en nuestro interior nos impulsa a tener malos sentimientos hacia la persona a la que consideramos como responsable de nuestro drama. El resentimiento nos condena a resentir un suceso una y otra vez. Es como si revivieras la ruptura en el continuo tiempo. Pero tú eres el creador de tu realidad y, por tanto, elijes la visión que deseas tener de los acontecimientos. Para ello es fundamental que aprendas a perdonar, ya que, aunque te parezca imposible ahora mismo, es la herramienta sanadora por excelencia.

La base de nuestra vida es la libertad y es el perdón el que nos la otorga. Únicamente tú puedes crear tu experiencia. Por ello, debes darte cuenta de cómo moldea el resentimiento tus experiencias y tus vivencias, de cómo te paraliza y te impide progresar en cualquier área de tu vida. Reflexiona acerca de cómo empequeñece tu mundo, cómo hace que enferme todo tu ser y cómo infecta a tus relaciones.

El resentimiento tiene un efecto demoledor sobre nosotros porque es un veneno de vida que no deja que las cosas se vayan y se disuelvan. Es como una especie de resistencia a dejar ir las cosas. El resentimiento puede que te esté llevando a oponerte a llegar a acuerdos con la otra persona acerca de la casa en la que convivisteis, de los hijos o del reparto de muebles.

  • ¿Qué desgaste te produce esto?
  • ¿Para qué te opones a un acuerdo?
  • ¿Hacia dónde te lleva el resentimiento?
  • ¿Es esto lo que quieres para el resto de tu vida?
  • ¿Qué deseas experimentar?
  • ¿Qué quieres? ¿Amor? ¿Ser feliz? ¿Liberarte? ¿Superar la ruptura y vivir?

Piensa que el resentimiento te impide vibrar en la sintonía de lo que deseas y por eso no logras alcanzar la paz que anhelas.

La superación del resentimiento se logra sacando de nuestro interior el enfado y la ira, de forma adecuada y con la ayuda de ciertas técnicas de liberación emocional. Una vez que se ha depurado toda la emotividad negativa y se ha aceptado la irritación y el enfado que ha acompañado a esa ruptura, la persona ya está en situación para hacer un trabajo de despliegue de todo el valor y el coraje que lleva dentro de sí para pasar a la siguiente pantalla de su vida. No te quedes con espinas dentro de ti, pues podrás lastimar al que se acerca.