EEUU y Reino Unido retiran su apoyo a los rebeldes del norte de Siria
Los gobiernos de EEUU y Reino Unido han confirmado la suspensión temporal del envío de asistencia a los rebeldes sirios en el norte del país tras conocer sus luchas internas. Sin embargo, ninguno dejará de enviar ayuda humanitaria, según la BBC.
"Como consecuencia de esta situación, EEUU ha suspendido todas las próximas entregas de asistencia no letal en el norte de Siria", afirmó este miércoles Josh Earnest, portavoz adjunto de la Casa Blanca.
La Administración estadounidense está recabando información sobre lo ocurrido aparentemente el viernes, cuando rebeldes islamistas se hicieron con el control de bases que pertenecían al Ejército Libre Sirio (ELS), que ha recibido apoyo de Washington y otros países occidentales.
EEUU trata de determinar qué tipo de material ha pasado a control de Frente Islámico, una facción escindida del ELS, aunque seguirá suministrando a los rebeldes sirios en otras zonas del país.
Jen Psaki, portavoz del Departamento de Estado, ha informado de que aún tienen que averiguar si con la toma de control de esos almacenes el Frente Islámico tuvo acceso a armamento, otro tipo de ayuda que Estados Unidos provee al Consejo Militar Sirio del ELS.
ASISTENCIA NO LETAL
"Entendemos que han tenido acceso a asistencia no letal", por lo que se trataría, según Psaki, de paquetes de alimentos y primeros auxilios, equipos electrónicos, informáticos y de comunicaciones.
La pérdida de control de instalaciones del ELS se produjo en una zona cercana a la frontera con Turquía, mientras que Psaki ha asegurado que la ayuda sigue fluyendo desde otros países fronterizos con Siria.
"Una significativa parte de nuestra política hacia Siria ha sido enfocada a ofrecer apoyo a los elementos de la oposición que son moderados, que están comprometidos con el respeto de los derechos humanos básicos y con el respeto de las minorías religiosas y étnicas en el país", agregó el portavoz de la Casa Blanca.
Reino Unido ha anunciado una medida similar a través del secretario de Estado británico para Oriente Medio, Hugh Robertson, quien dijo que la situación en Siria "se ha vuelto en extremo compleja".
