El #Orgullo2015, ¿más emocionante que el #24M?

Este post ha sido escrito por Carmen Torrijos

Pensábamos que el pasado 24 de marzo habíamos vivido unas elecciones intensas que habían llenado las redes sociales de emociones, pero otro evento de carácter aún más emocional ha venido a superar su marca. El primer dato es que los más de 100.000 tuits recogidos durante el fin de semana del #Orgullo2015 contienen una carga emocional del 36.1%. Para ver la proporción, comparamos con los tuits recogidos durante el fin de semana de las elecciones del #24M y encontramos que la presencia de las emociones baja hasta un 22.9%, por lo que el #Orgullo2015 supera con creces al #24M en carga emocional.

¿Qué claves puede revelar el estudio de las emociones en redes sociales? El caso del #Orgullo2015 nos descubre todo un nuevo punto de vista con respecto al evento, y nos da un giro de ciento ochenta grandos a las expectativas sobre los datos, pues si estábamos pensando solo en emociones positivas de exaltación, alegría o euforia, los análisis automáticos del lenguaje humano presentan estas emociones positivas combinadas con otras que no lo son tanto, como la confusión, la queja o el desprecio. En un estudio más profundo y avanzado, podríamos estudiar de cerca el estado de ánimo de los ciudadanos para comprobar la penetración social de un evento, o si los grupos discrepantes tienen un carácter influenciador o marginal.

Al analizar las emociones y estados de ánimo expresados en Twitter, vimos que en esta ocasión ellas han sido las reinas de la fiesta, y no solo en intensidad, también en variedad. En el siguiente gráfico podemos ver el ranking de las diez emociones más presentes en los tuits del #Orgullo2015:

A ninguno nos sorprende encontrar la exaltación, la felicidad, el orgullo (¡en cuarta posición!) el placer o el amor, así que el análisis más interesante se encuentra entre las emociones negativas.

¿Por qué tiene tanta presencia la envidia? Está claro que fue una de las emociones más presentes entre los ausentes, y su manera de comunicarlo fue vía Twitter. Esta emoción se nos presenta en este contexto como positiva, y no como negativa, como podría esperarse, ya que tiene intrínsecamente una doble polaridad.

Los lamentos y quejas son en gran parte por la excesiva politización del evento:

El desprecio y la ira llegan en forma de acusaciones de hipocresía o expresiones de asco:

La vergüenza, en último lugar, asoma la cabeza en este ranking de emociones para expresar sentimientos negativos que tienen que ver con posiciones contrarias a la fiesta:

Terminamos con una nube de ideas de las palabras más representativas de este #Orgullo2015, que ha sido diferente también en las redes sociales. A pesar de todo lo anterior, el primer golpe de vista ya nos revela que las emociones positivas siempre vencen.