Una merienda para niños es vinculada al cáncer de colon
Y un clásico también entre adultos...
Un golpe a un clásico en la dieta de millones de niños, adolescentes y adultos de casi todo tipo. Un habitual en los patios de los colegios, en los almuerzos en el trabajo, en las meriendas a media tarde y hasta en las cenas.
El famoso bocadillo de jamón de york es de todo menos recomendable, a ojos de la Organización Mundial de la Salud. Y no es algo nuevo.
La OMS ya apuntó en 2015 que este producto es una carne procesada que favorece la aparición de cáncer de colon. Por carne procesada reconocía a toda carne "que se ha transformado a través de la salazón, el curado, la fermentación, el ahumado u otros procesos para mejorar su sabor o su conservación".
"La mayoría de las carnes procesadas contienen carne de cerdo o de res, pero también pueden contener otras carnes rojas, aves, menudencias o subproductos cárnicos tales como la sangre", detallaba la OMS en su informe.
Como añade El Español, este documento, no siempre tenido en cuenta, tira por tierra las campañas publicitarias, de marketing de numerosas compañías para ofrecer al jamón de york como alternativa sana, idónea para deportistas y dietas.
En el caso concreto del jamón de York, su bajo poder calórico le llega al añadirse algunos subproductos como el agua, que rebaja su contenido energético pero también su porcentaje de carne, un mal que también es aplicable a otros productos procesados.
