cementerios

El día en que en México conviven vivos y muertos

El día en que en México conviven vivos y muertos

Los muertos salen, llegan a las casas, se sientan, charlan sin charlar y regresan allá, lejos, tras saber que todo sigue ese orden impreciso en el que todos los vivos entienden que deben cruzar en algún momento de su lado. Y la fiesta, en este país con tanta imaginación y necesitado de vender su tanta vida, se desparrama por calles, montañas y cementerios. Es el Día de los Muertos en México.
Las cenizas, la culpa y la Iglesia

Las cenizas, la culpa y la Iglesia

La iglesia debería de ocuparse más de humanizar la pastoral de las despedidas y el duelo y menos de prohibir, más del amor y menos de la culpa, más de acompañar y menos de adoctrinar, porque cuando alguien sufre el tremendo dolor de la perdida necesita humanidad, amor y acompañamiento, y no prohibiciones, sentimientos de culpabilidad, ni doctrinas.
Hasta que la muerte nos desahucie

Hasta que la muerte nos desahucie

Hay cementerios de este país que están cambiando las cláusulas de los contratos, pasando del clásico "a perpetuidad", a una concesión por tiempo limitado. Una vez cumplido este tiempo, se procede al aviso de los familiares, que tendrán que abonar otra vez el precio del enterramiento.