el principito

Dibújame un cordero

Dibújame un cordero

"Dibújame un cordero", pedía el Principito al aviador extraviado en el desierto. Y éste no acertaba a la primera, ni a la segunda, ni a la tercera, ni incluso a la cuarta. Solo cuando esbozaba una caja y le decía que el animal estaba allí dentro quedaba conforme el niño de otro planeta. Entonces empezaba a imaginar.