La falta de agua limpia y de saneamiento añade sufrimiento a centenares de miles de personas y aumenta el riesgo de brotes de enfermedades en la franja, denuncia la ONG Médicos Sin Fronteras (MSF).
Desplazadas, embarazadas y viviendo en una tienda de campaña: la guerra interrumpe la atención materna y expone a miles de mujeres embarazadas y recién nacidos palestinos a riesgos mortales.
Ricardo Martínez, responsable de Logística de la unidad de Emergencias de la ONG, acaba de regresar de Gaza y relata en la SER, de forma desgarradora, lo que ha visto.
El 'otro' territorio palestino, el que alberga su capital administrativa, el que soporta a los colonos y la presencia constante del Ejército de Israel, vive el dolor de sus iguales en la franja y sufre, a la par, redadas, ataques y detenciones a niveles de récord.
Acaba de volver de Palestina y Jordania tremendamente preocupada por el nivel de violencia y la profundidad de los daños. Toda solución pasa, forzosamente, por un alto el fuego estable.
Mientras la mayoría de los titulares ponen el foco en otros temas, la sociedad y las entidades que defendemos los derechos humanos mantenemos todas las luces- y las alarmas- encendidas.
Una coordinadora médica, un cirujano y una traductora revelan cómo es el día a día en un región sumida en los bombardeos y ahogada por la falta de suministros básicos. "Muchos corren riesgo de morir en las próximas horas".
Médicos Sin Fronteras (MSF) recopila la historias de algunos de sus rescatados en el Mediterráneo, aterradoras experiencias de las que no hay rastro en el acuerdo recién firmado por la Comisión Europea y el país norteafricano.
En Cox's Bazar (Bangladesh) se encuentra el mayor campo de refugiados del mundo. Y en él, Médicos Sin Fronteras (MSF) colabora con una comunidad rohingya para transmitir su historia, su lucha diaria y sus tradiciones a través de cuentos tradicionales.
Un viaje a Hebrón y Nablus (Cisjordania), ciudades que condensan en sus calles todo el problema de la ocupación, de la mano de Médicos Sin Fronteras (MSF).
Más de 80.000 personas han llegado huyendo del conflicto en la provincia vecina de Kivu Norte en el convulso este de la República Democrática del Congo.
El dramático testimonio de Aisha, supervisora de matronas de Médicos Sin Fronteras (MSF) en Azaz, al norte de Siria, tras los terremotos del 6 de febrero.
Trabajadoras de Médicos Sin Fronteras (MSF) en Afganistán expresan su temor al impacto que puede tener que la prohibición se extienda al personal sanitario.
Las sucesivas olas de violencia en la República Centroafricana han obligado a la población a abandonar sus casas y a dejarlo todo. Hoy continúan resistiendo las graves consecuencias de años de conflicto.
Haber crecido en el noreste de Siria me hace ver que llegamos a la mentalidad adulta antes de tiempo. Nos perdimos la infancia. Mi plan de niño era viajar por el mundo.
La menor llevaba días en un islote, con 38 personas más, sin asistencia alguna. El grupo ya había sido devuelto en caliente y obligado de nuevo a hacerse a la mar.
Personas con discapacidad, enfermos crónicos y mayores han quedado atrapados por la guerra de Ucrania en zonas de intensos combates y sin atención médica.
Michael Malley, pediatra de MSF, relata el tratamiento a una niña con malaria y meningitis en una zona en disputa entre Sudán y Sudán del sur, un viaje de angustia y felicidad, del coma a la sonrisa.