La venganza de Pedro Sánchez

La venganza de Pedro Sánchez

Una vez que Pedro Sánchez haya logrado que Mariano Rajoy muerda el polvo, quizá quede aplacada su sed de venganza y su núcleo de confianza deje de alimentar la idea de que, si el presidente en funciones fracasa, todavía tiene una posibilidad de ser presidente. En caso de que se cumplan estas dos premisas, el secretario general podría aceptar valorar los pros y los contras de la abstención. Algo que todavía no ha explorado, por decisión propia.

Una vez que Pedro Sánchez haya logrado que Mariano Rajoy muerda el polvo, quizá quede aplacada su sed de venganza y su núcleo de confianza deje de alimentar la idea de que, si el presidente en funciones fracasa, todavía tiene una posibilidad de ser presidente. En caso de que se cumplan estas dos premisas, el secretario general podría aceptar valorar los pros y los contras de la abstención. Algo que todavía no ha explorado, por decisión propia.

Durante todo agosto el equipo del 'no' pequeñito de Sánchez se ha convertido en un 'NO' muy grande, que ahora habrá que ver cómo gestionan. La división de posturas entre el círculo más próximo y algunos miembros del equipo de asesores, aflorará después del viernes, tras la segunda votación.

Este verano, Óscar López y César Luena han estado transmitiendo a los dirigentes territoriales que el 'no' es 'no' hasta el final y que se iba a recuperar la vía de un gobierno de izquierdas con Podemos. Posibilidad que pone los pelos como escarpias a quienes vivieron en primera línea la negociación con Podemos y el plantón de Pablo Iglesias, cuando ya estaban citados los equipos para comenzar a trabajar al día siguiente.

La tesis extendida de que es mejor abstenerse después de las elecciones vascas y gallegas del 25 de septiembre para que no perjudique en los resultados el hecho de hacer presidente a Rajoy, es rebatida por quienes argumentan que será aun peor abstenerse después de que los votos caigan, tal y como apuntan las encuestas. La debilidad del PSOE será mayor.

Pedro Sánchez se enfrenta esta mañana al ninguneo que mostró ayer Rajoy durante su discurso

Pedro Sánchez se enfrenta esta mañana al ninguneo que mostró ayer Rajoy durante su discurso. Ni una sola vez pidió a los socialistas el voto. Hasta en Ciudadanos sorprendió su postura. "Ha tirado la toalla con Pedro Sánchez, por eso no les ha mencionado" explicaba anoche un dirigente de C's. "Nos hemos quedado de piedra de que Rajoy, en lugar de pedir expresamente a Pedro Sánchez su abstención reconociendo la dificultad y el sacrificio que implica, haya pasado de él olímpicamente evitando citarle en ningún momento" comentaba sorprendida un miembro de la Ejecutiva de Ciudadanos.

En la cafetería del Congreso, un grupo de destacados socialistas entre los que se encontraban María González Veracruz y Pedro Saura, valoraban con matices el hecho de que el candidato del PP hubiera evitado pedir su apoyo. "Rajoy ha hecho este discurso pensando: 'yo voy a ser presidente con unas terceras elecciones o con la abstención del PSOE, así que para qué". Mientras que un dirigente andaluz advertía: "Se verá que el rabo de toro de Guisando se sirve en plato frío".

Habrá que ver en qué queda ese discurso elaborado por el guionista de Cuéntame, Jacobo Delgado, que ha pasado por tantas manos desde su primera versión.