El presidente de Irlanda pasa sus vacaciones en un curso de español en Santander

El presidente de Irlanda pasa sus vacaciones en un curso de español en Santander

El presidente de Irlanda, Michael D. Higgins, ha dedicado tres semanas del verano a aprender español en la Universidad Internacional Menéndez Pelayo (UIMP) de Santander, según ha informado este sábado la institución académica.

Se trata, según subraya en un comunicado, de "un presidente diferente que ha pasado unas vacaciones singulares en Cantabria". El mandatario irlandés concluyó este viernes una estancia de tres semanas en la capital cántabra, donde se convirtió en "un alumno más" de los cursos de español de la UIMP, en cuyo Campus de Las Llamas ha compartido aula con estudiantes japoneses, austriacos o polacos.

Su presencia en la capital cántabra ha pasado totalmente desapercibida por expreso deseo de un presidente que, a sus 71 años, ha dedicado su tiempo de ocio veraniego a soltarse en el idioma castellano.

COMPLICIDAD

Para conseguir su objetivo fue muy necesaria la "complicidad" de la UIMP. Higgins se matriculó en un curso de Lengua y Cultura (al igual que su esposa, la actriz retirada Sabina Coyne) hace un par de meses: ambos lo hicieron en tiempo y forma y pagando la tarifa correspondiente. De esta manera, quería mejorar su competencia lingüística de cara a un viaje institucional que realizará en octubre por Chile, Argentina y Brasil.

Pero una vez se conoció su identidad, la universidad tuvo que prestarse a tomar unas mínimas medidas de seguridad y, especialmente, todos aquellos que conocían su asistencia a los cursos tuvieron que confabularse para que no fuera 'descubierto' por los medios de comunicación. Higgins quería una estancia "tranquila", poder centrarse en sus estudios y mantener su iniciativa dentro de un carácter estrictamente privado.

Su rutina académica ha sido la de cualquier otro alumno de la UIMP. Tuvo cinco horas de clase los 15 primeros días, en los que practicaba junto con otros siete estudiantes. La última semana, según explicó la vicerrectora de Lenguas e Internacionalización, Lourdes Díaz, siguió un plan diseñado específicamente para él, "un cargo político necesitado de léxico jurídico y financiero".

"Ahora mismo es capaz de hablar con fluidez, de forma espontánea, y lee y entiende textos literarios complejos", asegura la vicerrectora. O sea, se encuentra en un nivel A2, que le ha servido para reflexionar sobre su admirado Víctor Jara, sobre filosofía o sobre sociología.