La Ertzaintza desautoriza un escrache a un diputado del PP en San Sebastián

La Ertzaintza desautoriza un escrache a un diputado del PP en San Sebastián

EFE

La Ertzaintza ha dictado este lunes una resolución para desautorizar una concentración de Stop Desahucios en San Sebastián ante el domicilio y el lugar de trabajo del diputado del PP José Eugenio Azpiroz, por entender que constituye "un ataque a la integridad moral" del político y su familia.

Lo que sí se ha permitido finalmente es que dos miembros del colectivo, previamente identificados, se acercaran hasta el buzón de la casa de Azpiroz para depositar una carta de adhesión a la Iniciativa Legislativa Popular que se tramita en el Congreso.

En nombre de Stop Desahucios Guipúzcoa, Mikel Sánchez ha explicado a los periodistas que han recibido la comunicación del Departamento vasco de Seguridad dos horas antes de la celebración de este escrache, convocado para las 18:00 horas de este lunes.

En el escrito que firma el director de la Ertzaintza, Gervasio Gabirondo, se daba la opción a este colectivo de efectuar una nueva convocatoria en otro lugar a una distancia al menos de 300 metros del domicilio de Azpiroz.

El portavoz de Stop Desahucios Guipúzcoa ha mostrado su disconformidad por los términos en los que se ha justificado la prohibición del escrache de hoy, ya que el responsable de la Ertzaintza habla de "un ataque no potencial, sino real, a la integridad moral, no sólo de la persona directamente afectada, sino también de su entorno familiar y laboral, y por ende privado".

PRÉSTAMO ABUSIVO

Por otra parte, un juez ha declarado nulo el préstamo hipotecario concedido a una pareja de Lanzarote a punto de ser desahuciada al considerar que los intereses de demora eran "abusivos", en un auto en el que sostiene que el afán de enriquecimiento de los bancos está en el origen de esta crisis.

En la decisión, el Juzgado de Primera Instancia número 4 de Arrecife declara "abusivos y usurarios" los intereses de demora del 19% que el BBVA cobraba a estos clientes por retrasarse en los pagos y denuncia que este tipo de prácticas bancarias constituye "un abuso inmoral que, desde luego, no puede ser consentido ni amparado por los Tribunales de Justicia".