Nueve trucos de los conductores para evitar el alcoholímetro
La aseguradora Línea Directa ha realizado una encuesta para descubrir cuáles son los trucos favoritos por los españoles para evitar dar positivo en el control de alcoholemia.
El estudio posterior concluye que el 10% de ellos -2,6 millones si se extrapola al censo total- ha utilizado alguno de esos trucos.
EL PERFIL DEL 'CREYENTE'
La comunidad en la que se da mayor credibilidad a estas prácticas es Madrid, mientras que en el País Vasco es donde más porcentaje de conductores conoce la existencia de los mitos, pese a que no confían tanto como los madrileños en su éxito.
El perfil del conductor que más cree en este tipo de "soluciones" es hombre, de entre 18 y 29 años, que reconoce haber conducido bajo los efectos del alcohol y que usa dispositivos tecnológicos para evitar controles.
Además, del sondeo se desprenden otros resultados, como que dos tercios de los conductores creen que los controles de alcoholemia son una medida recaudatoria, que el 35% pone en duda la efectividad de los test y que el 9% de los encuestados aprueba el uso de los mencionados trucos.
Igualmente, dos de cada tres desconocen la tasa máxima de alcohol permitida y el 94% ignora el límite en que esta infracción se convierte en delito penal (0,6 miligramos de alcohol por litro de aire expirado).
LÍNEA DIRECTA DESMONTA LOS MITOS
La aseguradora quiso demostrar la idea de que hay métodos para evitar el positivo si se ha bebido demasiado e hizo una una prueba con un hombre y una mujer de unos 37 años.
Tras una comida ligera, ambos sujetos se tomaron un tercio de cerveza, una buena copa de vino y un cubalibre bien cargadito. Lo habitual en una comida festiva. Sin embargo, no hubo manera de que el alcoholímetro descendiera de la tasa límite máxima -0,25 miligramos de alcohol por litro de aire expirado-, ni siquiera después de practicar los trucos.
Mientras, tal y como ha recordado Francisco Valencia, director de Gobierno Corporativo de Línea Directa, el número de conductores muertos en accidente y que habían ingerido alcohol o drogas sigue creciendo frente al descenso global del número de fallecidos en siniestros de circulación.
Según los resultados del Instituto Nacional de Toxicología, en 2012 el 35% de los conductores fallecidos superaba la tasa límite del 0,25 y, de ellos, el 70% incluso la del 0,6.
