Indignación por los consejos de Interior para evitar violaciones

Indignación por los consejos de Interior para evitar violaciones

Llevar silbatos cuando caminas por la calle o echar las cortinas al anochecer "para evitar miradas indiscretas". Son dos de los consejos para evitar violaciones que el Ministerio del Interior publicó en su web a principios de julio y que ahora han generado las críticas de varias diputadas del PSOE, que han criticado al Departamento que dirige Jorge Fernández Díaz de culpabilizar a la mujer.

Las dirigentes socialistas han mostrado su rechazo a estos consejos tras la violación este fin de semana en Málaga de una mujer a manos de un grupo de cinco jóvenes.

"Una forma de meter miedo, culpabilizar a las mujeres y eludir responsabilidades. Eso es lo que según ellos debemos hacer las mujeres...¿Y el gobierno de qué se responsabiliza? ¿Qué es lo que hace? #asíNo", ha dicho en Twitter la secretaria de Igualdad de la nueva Ejecutiva del PSOE, Carmen Montón.

La citada red social ha sido el lugar donde han vertido sus críticas estas dirigentes socialistas como la secretaria de Administraciones Públicas, Susana Sumelzo, para quien "la realidad supera la ficción". También para la diputada valenciana Susana Ros: "Lo que me faltaba por leer: Interior recomienda cerrar las cortinas de casa para evitar violaciones".

"¡INSOPORTABLE!"

Enérgica se ha manifestado en otro comentario recogido por Europa Press la diputada canaria Patricia Hernández: "Y la responsabilidad vuelve a recaer en la mujer, ¡Insoportable!. La mujer que no desee ser violada debería considerar la posibilidad de comprar un silbato".

Otras dos dirigentes socialistas dedicadas en los últimos años a la Igualdad como la ex secretaria de Estado de la materia durante el Gobierno de Zapatero, Soledad Murillo, y la ex secretaria del ramo en la Ejecutiva del PSOE, Puri Causapié, también se han mostrado críticas con los consejos de Interior.

A juicio de Murillo "no hay mayor peligro que un Gobierno de incompetentes: cerrar las cortinas para evitar las violaciones dice el Ministerio del Interior". Por su parte, Causapié denuncia que se "vuelve a poner la responsabilidad sobre violación en mujeres. Me ha recordado a la 'sentencia minifalda'' (una resolución de 1989 en la que se justificó una agresión sexual por la indumentaria de la víctima).

RECOMENDACIONES DE INTERIOR

Estos comentarios responden a una serie de consejos recogidos en la página web del Ministerio del Interior que bajo el epígrafe de 'Prevención de la violación' se introducen un total de nueve recomendaciones como "no hacer auto-stop ni recoger en su coche a desconocidos" o "por la noche, evitar las paradas solitarias de autobuses. Si el autobús no está muy concurrido, procure sentarse cerca del conductor".

También se recomienda "no pasear por descampados ni calles solitarias, sobre todo de noche, ni sola ni acompañada" y en caso de verse obligada a ello "habitualmente" se insta a "cambiar el itinerario". Interior añade que "en otros países se utilizan silbatos para ahuyentar al delincuente" por lo que recomienda a las mujeres que "consideren la posibilidad de adquirir uno". Este consejo ha irritado especialmente a las dirigentes socialistas.

Tampoco ha gustado otro en el que el Ministerio aboga por "echar las cortinas al anochecer para evitar miradas indiscretas" o tener "encendidas las luces de dos o más habitaciones para aparentar la presencia de dos o más personas en el domicilio".

"NO PONER EL NOMBRE EN EL BUZÓN"

"Si vive usted sola, no ponga su nombre de pila en el buzón de correos, sólo la inicial. Evite entrar en el ascensor cuando esté ocupado por un extraño, especialmente en edificios de apartamentos. De cualquier modo, sitúese lo más cerca posible del pulsador de alarma", son otros de los consejos que se pueden leer en la web oficial del Ministerio.

Ante un intento de violación, se recomienda a la víctima que "trate de huir y pedir socorro" y "si no puede escapar", que 'procure entablar conversación con el presunto violador con objeto de disuadirle y ganar tiempo en espera de una circunstancia que pueda favorecer la llegada de auxilio o permitir su huida. Todo ello, mientras observa los rasgos físicos de su agresor, "en la medida de lo posible".

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