Un hombre atrincherado en un bar de Zaragoza se suicida después de 20 horas

Un hombre atrincherado en un bar de Zaragoza se suicida después de 20 horas

5c8b756024000093024d88b3JAVIER BELVER/EFE

Se llamaba Luis, tenía 62 años, estaba armado y llevaba 20 horas atrincherado en un bar Maxi 2 de la calle La Salina de Zaragoza. La Policía decidió acceder al local sobre las seis de la tarde del martes después de una noche y un día de negociaciones infructuosas y tras escuchar detonaciones. No consiguieron sacarle del bar con vida. Finalmente el hombre se suicidó.

La Jefatura Superior de Policía de Aragón confirmó poco después de las siete de la tarde que minutos antes el hombre se había quitado la vida.

Luis Pedro R.G. se encerró a las 23 horas del lunes, en el altillo del bar, después de una discusión con su expareja, armado con una pistola de la que la policía desconoce el tipo y el calibre. El hombre no había hecho ninguna petición especial a los negociadores que intentaban que desistiese en su encierro.

PROBLEMAS SENTIMENTALES Y ECONÓMICOS

Según fuentes cercanas a la pareja, las razones que habían podido llevar a este hombre a encerrarse en el bar eran sentimentales y económicas. Su exnovia había terminado la relación con él después de que él le hubiese prestado entre 30.000 y 40.000 euros para pagar, precisamente, el traspaso del local en el que estuvo atrincherado.

Esta mujer, de nombre Fátima, y la madre, la hermana y el hijo del atrincherado, de 20 años, acudieron a lo largo del día hasta el bar Maxi 2 para intentar convencerle a Luis de que abandonara su encierro, sin conseguirlo.

Fátima había declarado a los medios de comunicación después de hablar con su exnovio -a distancia para no poner en riesgo su integridad-, éste sólo buscaba "protagonismo" puesto que no lo creía "capaz de disparar a nadie".

CUMPLIÓ SU AMENAZA

En un primer momento, según varios testimonios, Luis se había mostrado nervioso, pero poco a poco había ido tranquilizándose, a pesar de lo cual, la Policía Nacional esperó horas antes de entrar en el local por la fuerza, puesto que en algún momento el hombre había amenazado con suicidarse. Al lugar de los hechos se había desplazado un equipo de los GOE (Grupo de Operaciones Especiales, similares a los GEO), efectivos de la Policía Local y una ambulancia.

La zona permaneció acordonada y las vías adyacentes a la calle La Salina (Santa Lucía y Cereros) estuvieron cortadas al tráfico con un amplio dispositivo de la Policía Local de Zaragoza. En las inmediaciones del bar Maxi 2 se congregan numerosos curiosos y vecinos.