Teresa Romero demanda al consejero de Sanidad de Madrid por vulnerar su honor

Teresa Romero demanda al consejero de Sanidad de Madrid por vulnerar su honor

EFE

La auxiliar de enfermería Teresa Romero, ya recuperada de ébola, y su marido, Javier Limón, han presentado hoy en un Juzgado de Alcorcón una demanda civil en la que reclaman 150.000 euros al consejero de Sanidad, Javier Rodríguez, por vulneración del derecho al honor.

Aunque antes de llegar a juicio, los abogados del matrimonio tratarán de resolver la reclamación en un acto de conciliación entre las partes, la auxiliar y su esposo, que han solicitado también la iniciación de un procedimiento de responsabilidad patrimonial por el sacrificio de su perro Excálibur, tienen previsto donar en parte o en su totalidad la indemnización de 150.000 euros a una o varias asociaciones de defensa de los animales, según uno de sus abogados, Nicolás Marchal.

Para Marchal, el consejero de Sanidad de la Comunidad de Madrid atentó contra los derechos constitucionales al honor y la intimidad de la auxiliar de enfermería al acusarla "con la máxima publicidad" de mentir y ocultar información. Según la demanda, Rodríguez afirmó el 8 de octubre que la auxiliar con ébola "ocultó" al médico de atención primaria que había estado tratando al misionero Manuel García Viejo y dijo que "pudo haber estado mintiendo" sobre su fiebre.

Ante la Comisión de Sanidad de la Asamblea de Madrid, Rodríguez, quien insistió en varias ocasiones en culpabilizar a la auxiliar, señaló que Romero "también había negado ninguna alteración en el protocolo hasta que hoy ha reconocido a su médico que posiblemente cometió un error, porque al desvestirse tuvo un contacto directamente con su cuerpo con un guante".

El consejero afirmó también que la auxiliar de enfermería no informó a su médico de atención primaria de que había estado tratando a un paciente contagiado de ébola. Rodríguez comentó, además y en alusión a Romero que "para explicar a uno cómo quitarse o ponerse un traje no hace falta un máster. Pero unos tienen una mayor capacidad de aprendizaje que otros". Días después de sus declaraciones, el consejero de Sanidad pidió perdón por carta a la auxiliar y a su marido.