La Policía investiga si un hombre hallado muerto en un tejado de Londres cayó de un avión

La Policía investiga si un hombre hallado muerto en un tejado de Londres cayó de un avión

La Policía británica si dos sucesos ocurridos en Londres guardan relación. El jueves por la mañana encontraron el cuerpo de un hombre en el tejado de un edificio de oficinas en Richmond, en el suroeste de la capital. Poco antes, otro hombre había sido hallado inconsciente en el tren de aterrizaje de un avión de British Airways que acababa de llegar al cercano aeropuerto de Heathrow procedente de Johannesburgo (Sudáfrica). La Policía trata de averiguar si el cuerpo hallado cayó del avión y era también un polizón.

"En estos momentos no hay evidencias que vinculen la muerte con el descubrimiento de un polizonte en el tren de aterrizaje de un avión en el aeropuerto de Heathrow", ha indicado la Policía en un comunicado. "Sin embargo, esta es una de las líneas de investigación para identificar al fallecido y las circunstancias de su muerte", ha añadido.

Por otra parte, la Policía ha indicado que el superviviente había sido encontrado alrededor de una hora antes. "Hacia las 8:30 horas del 18 de junio la Policía en el aeropuerto de Heathrow fue alertada ante las informaciones de un presunto polizonte en un vuelo desde Johannesburgo a Heathrow", ha explicado. El trayecto es de 13.000 kilómetros.

"El hombre, que se cree tiene 24 años, fue encontrado en el tren de aterrizaje del avión y trasladado al hospital. Su estado actual es descrito como crítico", ha precisado.

NO ES EXTRAÑO QUE APAREZCAN CADÁVERES EN ESA ZONA

Por su parte, British Airways ha indicado en un breve comunicado que está trabajando con la Policía y las autoridades en Johannesburgo "para aclarar los hechos en torno a esta situación muy extraña".

En el pasado se han encontrado cadáveres en la calle en las zonas de Richmond y Kew, en Londres, que se encuentran bajo el punto en el que muchos aviones abren sus trenes de aterrizaje en su aproximación a Heathrow.

Los expertos afirman que las posibilidades de que un polizonte consiga evitar ser aplastado por las ruedas cuando se recogen tras el despegue o congelarse hasta la muerte durante el vuelo son muy pequeñas. En esa zona del avión también falta el oxígeno.