26 sensaciones que hay que experimentar alguna vez en la vida

26 sensaciones que hay que experimentar alguna vez en la vida

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Como cumplo años dentro de poco, he estado reflexionando sobre los sentimientos. Tengo muchísimos.

Si algo he aprendido durante mi corta estancia en este planeta es la importancia de estar en contacto con uno mismo a nivel emocional. Cada interacción y experiencia que uno tiene despierta un sentimiento determinado (o varios) y es importante ser consciente de ello.

Tengo muchos sentimientos...

Las emociones que experimentamos regularmente son las que nos hacen ser humanos. Pero no hay nada malo en eso; de hecho, es lo que le da valor a la vida.

Abajo encontrarás 26 (¿alguien ha adivinado ya cuántos años cumplo?) sensaciones que deberías experimentar en algún momento de la vida. Todo el mundo debería saber lo que siente cuando:

1. Viajas por primera vez a un sitio.

Pocas cosas hay más emocionantes que explorar territorio desconocido, ya sea en otro país o en tu propia ciudad. La ciencia lo respalda: un estudio demuestra que la gente es más feliz cuando se gasta el dinero en experiencias que cuando se lo gasta en objetos materiales.

2. Te duele el estómago de tanto reír.

El mejor de los colocones. La risa es la mejor medicina. Es más, la risa estimula el sistema inmunitario, disminuye la presión sanguínea y aumenta los niveles de felicidad.

3. Alguien te dice "te quiero".

No importa si te lo dice tu pareja, tu madre o tu mejor amigo: el amor es una experiencia biológica, corporal y mental. Es el único sentimiento completamente universal.

4. Realizas una buena acción desinteresadamente.

La capacidad de dibujar una sonrisa en la cara de otra persona puede influir en tus niveles de felicidad. Por no hablar de que, además, hace del mundo un lugar mejor.

5. Alguien es amable contigo.

Devuelve esa amabilidad cuando tengas la oportunidad y haz que siga el ciclo sin fin.

6. Expresas lo que piensas.

Ciertos estudios sugieren que dar muchas vueltas a todo, aparte provocar más estrés, influye en la manera de realizar tareas simples. Tenemos todo el derecho del mundo a expresar nuestros pensamientos y opiniones. Exprésate con claridad y convicción.

¡¡¡Esa es mi opinión!!!

7. Alguien te conoce bien.

Sois como uña y carne, como las palomitas y una buena película, como Harry Potter y Ron Weasley, como la nutella y… ¡cualquier cosa! Hay pocas cosas mejores que saber que has encontrado a ese alguien que te entiende a la perfección. Y, según parece, tiene sus beneficios: un estudio de 2011 señala que estar con tu mejor amigo puede reducir el estrés.

8. Te aceptas a ti mismo por completo.

Según la ciencia, la aceptación de uno mismo es la clave para ser más feliz; y también es el hábito que menos practica mucha gente. Repite conmigo: cuidar de uno mismo no es ser egoísta.

9. Te rompen el corazón.

Es imposible pasar por la vida experimentando únicamente sensaciones agradables. La vida también tiene sus momentos difíciles, entre los que se incluyen los momentos de dolor y de corazón partido. Sin embargo, esos momentos son los que nos hacen aprender más de nosotros mismos.

10. Estás totalmente relajado.

El estrés nos afecta mucho y la mejor manera de combatirlo es darle prioridad a tener tiempo para uno mismo. La relajación no solo es beneficiosa para tu salud física y mental, sino que además hará que te sientas genial.

11. Descubres que te han preparado una fiesta sorpresa.

¿Hay algo mejor que ver que tus seres queridos se han puesto de acuerdo para hacerte sentir especial?

(Respuesta: NO).

12. Acaricias a un animal.

Como bien dijo una vez el creador de Snoopy, Charles Schulz: "La felicidad es un cachorrito". Las mascotas mejoran tu salud y tus niveles de felicidad. Si quieres saber lo que es el amor incondicional, lo único que tienes que hacer es pasar un rato con un perro.

13. Te despiertas después de haber dormido como un bebé.

Dormir no es de débiles. Descansar bien te permite afrontar el día con entusiasmo y con más facilidad (y además es beneficioso para tu salud). Nunca he oído a nadie decir "estoy estupendamente" después de dormir tres horas y levantarse agotado.

14. Te dejas envolver por el momento.

En un concierto. Durante una conversación profunda con un amigo. Mientras juegas con tus hijos en el parque. Vive el aquí y el ahora. El presente es muy poderoso.

15. Tienes que decir adiós.

Seamos sinceros: las despedidas son horribles. Pero son necesarias. No se puede ir por la vida evitando las emociones dolorosas o difíciles. Porque, aunque pueden ser duras, también pueden suponer el comienzo de un cambio a mejor.

16. Te sientes como en casa en un sitio nuevo.

Se ha descubierto que la nostalgia es similar a un tipo de ansiedad. Según la CNN, el fenómeno "deriva de nuestra necesidad instintiva de amor, protección y seguridad; unos sentimientos y cualidades que solemos asociar con el hogar".

Por eso, cuando por fin te adaptas a un nuevo entorno, ese dolor por echar de menos tu casa desaparece porque este nuevo entorno se ha convertido en tu casa.

17. Fracasas.

La vida no es como un lápiz con una goma al final. No se puede pasar por ella sin cometer errores constantemente. Lo que da forma a tu carácter y te ayuda a tener éxito en la vida es tu manera de afrontarlos y de cambiar para mejorar.

18. Terminas de hacer ejercicio.

No se puede luchar contra la ciencia: las endorfinas están ahí. Eres más feliz después de hacer ejercicio: así de simple.

19. Te enfadas.

Reprimir la ira no tiene por qué ser beneficioso para tu bienestar. A veces es una llamada de atención. No es que tengas que darle un puñetazo en la cara a la persona que te haya hecho enfadar, pero quizá signifique que debes reevaluar las circunstancias (y la persona) que te han llevado a sentirte así. Nunca ignores las cosas que provocan una reacción en ti.

20. Haces un nuevo amigo.

El vínculo que se crea es más real de lo que piensas. Existen estudios que demuestran que la conexión social estimula el área de recompensas del cerebro.

—¿Acabamos de convertirnos en mejores amigos?

—Sí.

21. Las cosas salen bien.

Da igual si es por algo gordo o por una pequeñez, te mereces experimentar el éxito. ¿Necesitas un truco para alcanzarlo? Escríbelo en un papel. Hay ciertas investigaciones que afirman que ayuda a ser perseverante.

22. Te aceptan.

Es reconfortante sentirse aceptado. Y eso no va solo por los demás, sino también por ti mismo (como ya hemos mencionado antes en el punto 8). Tú tienes más capacidad que nadie para animarte.

23. Consigues el trabajo de tus sueños.

Los trabajadores son más felices cuando se sienten comprometidos con su trabajo. Pasas un montón de horas en el trabajo, te mereces que sea satisfactorio.

24. Obtienes reconocimiento.

El reconocimiento de tu valor puede venir de ti mismo, no esperes a que los demás te confirmen lo que vales. Sus opiniones son válidas, pero tu trabajo y tus sentimientos también lo son.

25. Estás solo.

No confundir con "sentirse solo". Estar solo y disfrutar de tu propia compañía es reconfortante. Pasar tiempo solo es beneficioso para tu bienestar mental. Eres una persona genial, ¿por qué no ibas a querer estar contigo mismo?

26. Estás completamente feliz.

Porque, por encima de todo, te mereces experimentar la alegría. Sí o sí.

Choca esos cinco con un millón de ángeles

Este artículo fue publicado originalmente en la edición estadounidense de 'The Huffington Post' y ha sido traducido del inglés por Lara Eleno Romero.

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