Colombia vota 'no' al acuerdo de paz con las FARC por un 50,24%

Colombia vota 'no' al acuerdo de paz con las FARC por un 50,24%

Nadie lo esperaba, pero ha sucedido: Colombia ha votado 'no' al acuerdo de paz con las FARC por sólo 62.000 votos de diferencia, al 99% escrutado. El 'no' ha obtenido 6.400.516 votos, que equivalen al 50,24% del total, mientras que el 'sí', que había comenzado liderando el recuento, se ha hecho con 6.338.473 papeletas, que representan el 49,75%. A esto hay que sumarle el elevado porcentaje de abstención, que ha sido del 62,6%.

Colombia esperaba dar este domingo carpetazo definitivo al capítulo más sangriento de su historia, pero el resultado del referéndum hace naufragar el pacto para acabar con un conflicto armado que ha durado más de medio siglo, que ha dejado ocho millones de víctimas y que ahora corre el riesgo de recrudecerse. La sombra de la incertidumbre se cierne sobre el país, que tiene ante sí el reto inmediato de evitar que continúe el conflicto armado.

De momento, tal y como ha explicado el presidente de Colombia, Juan Manuel Santos, en un mensaje televisado dirigido a la nación, el acuerdo para el alto al fuego bilateral no se ha acabado. "El cese el fuego bilateral y definitivo sigue vigente y seguirá vigente", ha asegurado el jefe de Estado en una breve alocución al país desde la Casa de Nariño, sede del Gobierno. Entre las medidas inmediatas que Santo llevará a cabo está la de convocar a "todas las fuerzas políticas del país para abrir espacios de diálogo mañana mismo". Asimismo, ha comunicado que ha ordenado a los negociadores de paz del Gobierno que viajen a La Habana para informar a las FARC sobre un "diálogo nacional".

El cese el fuego bilateral y definitivo sigue vigente y seguirá vigente

De manera casi simultánea se ha pronunciado el máximo líder de las FARC, Timoleón Jiménez, "Timochenko", que ha manifestado que mantienen "su voluntad de paz" "y su disposición de usar solamente la palabra como arma de construcción hacia el futuro". "Las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia lamentan profundamente que el poder destructivo de los que siembran odio y rencor haya influido en la opinión de la población colombiana", ha dicho Timochenko.La guerrilla tiene previsto, tras esta primera reflexión, mantener una reunión para "analizar con calma todos los detalles" del resultado de la consulta popular.

Antes de las palabras de su líder, las FARC habían publicado sus intenciones a través de su cuenta de Twitter:

Por su parte, el Ejército de Liberación Nacional (ELN), que se había comprometido a no perpetrar "acciones ofensivas" para no comprometer el plebiscito, también ha reaccionado instantes después de conocer el resultado. A través de su cuenta de Twitter, el ELN ha dicho que "a pesar de los resultados" hay que "continuar luchando por la paz".

Todas las miradas se posan ahora sobre Santos, que es consciente de que este resultado es un duro golpe a su mandato ya que hizo del plebiscito su causa. De hecho, el presidente colombiano llegó a cambiar determinadas reglas del juego electoral para ganar la consulta. Para empezar, bajo su mandato se redujo el umbral de participación al 13%, lo que permitió que los funcionarios públicos y altos cargos participaran en campaña, algo que está prohibido. Además, la campaña comenzó mucho antes de que el Consejo Nacional Electoral lo permitiera.

Frente a Santos, la postura del 'no' estaba liderada por el ex presidente Álvaro Uribe y el Centro Democrático, que se había opuesto desde el principio a toda negociación entre gobierno y las FARC. Es, sin duda, una de las figuras que más reforzadas sale de este referéndum. Durante el mes de campaña del plebiscito, el exmandatario ha jugado sus cartas para conseguir que su postura fuera la ganadora: convencer a los votantes de que si se rechazaban los acuerdos, estos se podrían renegociar, algo que ni Gobierno ni FARC han mencionado. La posibilidad de participar en política de los líderes guerrilleros y el hecho de que ninguno pagará cárcel siempre y cuando reconozca sus crímenes, ha sido la piedra angular de su campaña, consciente de que son pocos los colombianos que ven este punto del acuerdo con buenos ojos.

De hecho, cómo los colombianos rechazan el indulto a las FARC es uno de los motivos que han propiciado este desenlace, según analiza el diario El Comercio.

El hecho de que la abstención haya sido tan elevada tampoco ha ayudado. El clima, que este domingo no ha acompañado, no ha favorecido la participación en zonas clave. El coletazo del huracán Matthew se ha notado especialmente en La Costa, bastión del 'sí'. Además, importantes capitales nacionales han votado ‘no’: esta opción se ha impuesto en Medellín, Villavicencio, Ibagué y Cúcuta.

De nada ha servido, por tanto, que las FARC hayan pedido perdón a sus víctimas, ni que el pasado sábado anunciasen que harían un inventario de sus bienes, algo a lo que se habían negado hasta ahora. La destrucción, verificada por la ONU -que ha jugado un papel clave en el proceso de paz- de cerca de 600 kilos de explosivos el día anterior al plebiscito, tampoco ha supuesto un incentivo a la hora de votar.

El resultado del referéndum deja, por tanto, a Colombia en una situación muy delicada: el país está dividido en dos. Las FARC tendrán que decidir si siguen o no negociando la paz y cómo lo harán. Queda en el aire si continuarán trabajando en el camino hacia el desarme, la reconciliación y el principio del fin de la violencia guerrillera. Timochenko ha dicho que sí, que sólo usarán "la palabra como arma de construcción hacia el futuro". Falta que todos los colombianos crean que es así. Sólo entonces se podrá hablar de una verdadera paz para Colombia.