La Fiscalía belga descarta que el conductor temerario de Amberes fuera un terrorista
La investigación concluye que sólo se trató de la maniobra de un delincuente común armado y borracho.
La Fiscalía belga ha descartado que exista motivación terrorista alguna en la conducción temeraria de un individuo por una calle peatonal de Amberes (norte de Bélgica) el pasado 23 de marzo, un día después del atentado perpetrado con un vehículo a las puertas del Parlamento de Londres.
El Ministerio Público, sin embargo, ha prolongado la detención provisional durante un mes de Mohamed R., ciudadano tunecino de 39 años, en base a "infracciones sobre la legislación de armas", señaló en un comunicado.
El sospechoso fue detenido tras conducir a gran velocidad por una calle peatonal con su vehículo, en cuyo maletero portaba armas, lo que provocó el pánico entre los viandantes en una zona comercial y junto a un aparcamiento muy concurrido.
Inicialmente se le acusó de "tentativa de asesinato con carácter terrorista", entre otros cargos, aunque fuentes de la fiscalía informaron poco después de que parecía tratarse de un drogadicto bajo los efectos del alcohol.
El hombre era conocido por las autoridades por posesión ilegal de armas, indicó la cadena pública VRT. Ya estaba fichado por delitos menores cometidos en Francia -de allí era la matrícula de su coche-, pero su nombre no aparecía vinculado en ningún caso a redes de terrorismo yihadista. En el momento de ser arrestado estaba en posesión de sustancias estupefacientes y circulaba ebrio, por lo que los agentes tuvieron que demorar incluso su interrogatorio.
