El creador del primer bikini tenía un curioso criterio para decir si un bañador valía o no

El creador del primer bikini tenía un curioso criterio para decir si un bañador valía o no

Y era BASTANTE revelador.

Los trajes de baño de una pieza han pasado por una transformación muy favorecedora a lo largo de los años, pero siempre quedará un hueco en nuestros corazones playeros para el veraniego bikini.

El bikini, popularizado por Louis Réard (ingeniero reconvertido en diseñador de bañadores), cumplió 71 años el pasado martes 4 de julio. A sabiendas de que la prensa se haría eco de su creación, su padre decidió ponerle el nombre de una base de ensayos nucleares de Estados Unidos a su diseño de dos piezas.

Su primer bikini, en todo su esplendor:

  El nuevo 'bikini' causó sensación en un concurso de belleza de 1946 en París.Keystone via Getty Images

Réard tuvo bastantes problemas para encontrar a una modelo que estuviera dispuesta a ponerse este traje de baño tan arriesgado que había confeccionado a partir de unos 35 centímetros de tela. Así que contrató a la exótica bailarina Micheline Bernardini para que hiciera los honores.

Así posaba la modelo, con un bikini con estampado de periódico y sujetando una cajita en la que cabía el bañador.

#OnThisDay in 1946, French designer Louis Reard launches the "explosive" bikini -- taking the name from the Pacific site of US nuclear tests pic.twitter.com/n9HehiKV3V

— AFP news agency (@AFP) July 5, 2017

Tal día como hoy, en 1946, el diseñador francés Louis Réard lanzaba el "explosivo" bikini, que toma su nombre de una base de ensayos nucleares estadounidense.

Ha habido muchas versiones de la prenda de dos piezas a lo largo de los años, pero pocas han sido más reducidas que esta.

Según Réard, solo hay un criterio que hace que un bikini sea un bikini: "Un traje de baño no vale para nada a menos que pueda pasarse por el centro de una alianza".

Lo tendremos en cuenta en estas rebajas.

Este artículo fue publicado originalmente en la edición estadounidense del 'HuffPost' y ha sido traducido del inglés por Lara Eleno Romero.