Macron aprueba su reforma laboral en Francia pese a las protestas

Macron aprueba su reforma laboral en Francia pese a las protestas

Es el primer paso de una revisión más general del modelo social francés.

Imagen de archivo del presidente francés, Emmanuel Macron.AFP

El presidente francés, Emmanuel Macron, ha aprobado este viernes su reforma laboral, el primer paso de una revisión más general del modelo social francés, pese a la movilización de decenas de miles de personas en su contra.

El joven mandatario centrista de 39 años ha firmado el texto en una ceremonia televisada tras una reunión del consejo de ministros.

La reforma, adoptada a través del método acelerado de ordenanzas para evitar un largo proceso de debate legislativo, será publicada en el Diario Oficial la próxima semana y entrará inmediatamente en vigor.

Esta reforma del código laboral flexibilizará los despidos y las contrataciones, reforzará el papel negociador de las empresas sobre las condiciones laborales y limitará las indemnizaciones por despido improcedente. Los sindicatos estiman que da todos los poderes a las empresas y recorta los derechos de los trabajadores.

  Manifestantes se enfrentan a la policía durante una protesta en contra de la reforma laboral del presidente francés, Emmanuel MacronEFE

El jueves, más de 130.000 personas se manifestaron en todo el país para exigir la retirada del proyecto. En una primera jornada de movilizaciones el 12 de septiembre, unas 220.000 personas habían salido a las calles convocados por sindicatos de trabajadores.

Pero el gobierno asegura que las reformas impulsarán las contrataciones y frenarán el desempleo en Francia, que afecta al 9,5% de la población activa, frente a un promedio de 7,8% en Europa.

La opinión pública está por su parte dividida. Según una encuesta reciente de BVA, la mayoría de los encuestados estima que estas reformas aumentarán la competitividad de Francia pero no mejorarán las condiciones de trabajo de los empleados.

La reforma del código laboral es una parte fundamental de la agenda de Macron y el primer paso de una revisión más general del modelo social de Francia, que incluirá otros cambios mayores en las prestaciones de desempleo y las pensiones.