Guta: mil muertos en tres semanas

Guta: mil muertos en tres semanas

Este es el balance del Observatorio Sirio de Derechos Humanos desde que comenzó la ofensiva del régimen sirio contra este enclave rebelde.

AFP

Más de mil civiles han muerto desde que comenzó hace tres semanas la brutal ofensiva del régimen sirio contra el enclave rebelde de Guta Oriental, informó este sábado el Observatorio Sirio de Derechos Humanos (OSDH).

De las 1.002 víctimas civiles contabilizadas hasta el momento, al menos 215 son niños, según esa organización no gubernamental.

El saldo superó el millar de muertos tras la muerte de ocho personas en Harasta y Arbin este sábado, indicó la ONG.

Entre las víctimas civiles hay 215 niños

Los rescatistas sacaron además de los escombros 17 cadáveres en la ciudad de Duma, la principal ciudad de Guta Oriental, una región situada a las puertas de Damasco.

Las fuerzas del régimen, apoyadas por bombardeos aéreos incesantes, han reconquistado más de la mitad de la región.

Los ataques no dieron tregua este sábado, constató un corresponsal de la AFP en Duma, donde la población permanece escondida en sótanos.

Asedio desde el 18 de febrero

Desde el 18 de febrero, las fuerzas leales al presidente Bashar Al Asad, han sometido a este asediado enclave a un diluvio de fuego que ha costado la vida a mil civiles, y provocado colosales destrucciones.

Las fuerzas prorrégimen han conseguido retomar más de la mitad del enclave de 100 kilómetros cuadrados, controlado por dos facciones rebeldes y donde unos 400.000 habitantes se encuentran sitiados desde 2013.

Este sábado "aislaron Duma del resto de Guta Oriental, tras haber tomado el control de la carretera que la une a Harasta en el oeste y a la localidad de Misraba en el sur", informó el Observatorio. Su objetivo es debilitar a las facciones rebeldes que controlan el enclave, desde donde se lanzan obuses contra la capital siria causando víctimas.

"Nunca vi tanto miedo en los rostros", explican desde ACNUR

El consejo local de Duma lanzó una "llamada de socorro" dirigida a las organizaciones internacionales, afirmando que "numerosas personas dormían en los jardines públicos y en las carreteras, ya que los refugios y los sótanos estaban saturados".

Según este consejo, "enterrar (a los muertos) es difícil" por culpa de los bombardeos que alcanzaron el cementerio de la ciudad.

Desde el 18 de febrero solamente dos convoyes con ayuda humanitaria pudieron entrar en la parte rebelde de Guta para ayudar a la población, gracias a una tregua diaria y parcial anunciada por los rusos, que sin embargo no hizo cesar las hostilidades.

El representante en Siria de la Agencia de la ONU para los Refugiados (ACNUR), Sajjad Malik, quien entró en Guta en el primer convoy el lunes, afirmó que la región está "al borde de una catástrofe grave". "Nunca vi tanto miedo en los rostros", afirmó en una entrevista publicada en la página de ACNUR.