Trump habla por primera vez del pago a la actriz porno Stormy Daniels

Trump habla por primera vez del pago a la actriz porno Stormy Daniels

El dinero, 130.000 dólares, lo entregó su abogado.

AFP

Si por algo ha destacado Donald Trump desde que ascendió a la presidencia es por sus tuits incendiarios. El presidente de EEUU no se calla nada y publica sin filtro y sin aceptar consejos de nadie en Twitter.

Pero hay un asunto sobre el que siempre se ha mantenido callado. Y ahora, por primera vez, ha hablado.

El magnate ha asegurado este jueves que no sabía que su abogado personal, Michael Cohen, pagó 130.000 dólares a la actriz porno Stormy Daniels como parte de un acuerdo de confidencialidad sobre una relación sexual que supuestamente mantuvo con el millonario.

Esta es la primera vez que Trump hace declaraciones sobre las relaciones sexuales que presuntamente mantuvo en 2006 con la estrella de cine X cuyo nombre real es Stephanie Clifford.

"No", ha respondido Trump al ser preguntado si sabía algo sobre el pago a Daniels cuando viajaba con la prensa en un avión de vuelta a Washington desde Virginia Occidental.

Preguntado sobre por qué su abogado hizo el traspaso de dinero, Trump ha respondido: "Tenéis que preguntarle a Michael Cohen. Michael es mi abogado. Tendréis que preguntar a Michael".

Por último, al ser interrogado sobre si sabía de dónde procedía el dinero, Trump ha afirmado: "No, no lo sé". No se ha pronunciado sobre nada más.

La historia de un escándalo

La polémica comenzó a mediados de enero cuando el diario The Wall Street Journal desveló que, en la recta final de las elecciones de 2016, el abogado del mandatario transfirió 130.000 dólares a Daniels para evitar que hablara del supuesto encuentro sexual.

Esa transacción ha despertado suspicacias por la posibilidad de que violara las leyes estadounidenses sobre financiación electoral porque podría ser considerada un aporte ilegal a la campaña.

La aventura entre Daniels y Trump se inició, según la actriz, cuando ambos coincidieron en un torneo de golf en California en el verano de 2006, cuando Trump ya estaba casado con la actual primera dama Melania y acababa de tener un hijo con ella.

Lo que muchos ven como una historia frívola sobre el supuesto adulterio de Trump podría tener implicaciones legales para el presidente si se suma a los casos de las otras dos mujeres que le han llevado a los tribunales.

Una de ellas es Karen McDougal, una exmodelo de Playboy que asegura haber mantenido un romance con Trump hace más de una década y que ha pedido también anular un pacto firmado en 2016 donde se certificaba que guardaría silencio sobre esa relación.

Si Trump se viera obligado a testificar sobre su historial sexual bajo juramento, deberá tener en mente el precedente de Bill Clinton (1993-2001), quien fue sometido a un juicio político por haber mentido bajo juramento sobre sus relaciones con la becaria Monica Lewinsky.