El BCE, la Bolsa, las pensiones y otros dolores de cabeza económicos para Pedro Sánchez

El BCE, la Bolsa, las pensiones y otros dolores de cabeza económicos para Pedro Sánchez

El presidente del Gobierno afronta una serie de retos en materia económica con un contexto externo mucho menos favorable.

El presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, en el discurso de la moción de censura.AFP/Getty Images

Tras siete años con Mariano Rajoy en el Palacio de La Moncloa, el Congreso de los Diputados ha aprobado este viernes la moción de censura presentada por el PSOE. El líder de los socialistas, Pedro Sánchez, se ha convertido en el séptimo presidente del Gobierno de la democracia.

En El HuffPost analizamos la coyuntura económica a la que se enfrenta el nuevo Gobierno:

17 trimestres de crecimiento

La situación de la economía española que se encuentra Sánchez no tiene nada que ver con la que se encontró su antecesor, que tuvo que solicitar el rescate. España acumula 17 trimestres de crecimiento interanual. En el primer trimestre de este año, ha crecido un 0,7%, según el INE.

A pesar de los augurios de algunos, los analistas consideran que el cambio de inquilino en La Moncloa no afectará en gran medida a la marcha de la economía, que seguirá su recorrido. El PIB suma tres años consecutivos con un crecimiento por encima del 3%.

¿Qué ocurrirá este año? La Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económicos (OCDE) ha elevado esta semana la previsión de crecimiento para este año al 2,8%. Coincide así con la Fundación de Cajas de Ahorros (Funcas) y el Fondo Monetario Internacional (FMI). Por su parte, las previsiones del Gobierno y el Banco de España se sitúan una décima por debajo, un 2,7%.

Todo ello a pesar de que en el mundo de la inversión la mayoría son conscientes de la fragilidad que tiene un Ejecutivo sostenido únicamente por 84 diputados de los 350 que hay en el Congreso. "Teniendo en cuenta la composición del Parlamento, podría pensarse en una legislatura corta con previsibles elecciones en 2019 y una difícil gobernabilidad en el país", señala Pablo Fernández de Mosteyrín, analista financiero de Renta 4.

Mantener los presupuestos y los compromisos

España es el único país del club comunitario con un déficit público superior al 3% del PIB y que permanece bajo vigilancia, tras la salida de Francia del procedimiento por déficit excesivo. El Gobierno de Rajoy adquirió el compromiso de reducirlo del 3,1% de 2017 al 2,2% este año. Veremos si lo consigue, no parece fácil.

Sánchez se ha comprometido en el debate de la moción de censura a gobernar con los Presupuestos Generales del Estado para 2018 y a mantener los compromisos adquiridos con la Unión Europea. Un gesto que ha gustado a los mercados.

"La aprobación de los presupuestos otorgará una cierta estabilidad en el plano presupuestario y no podrá en riesgo los objetivos de déficit y de deuda solicitados por Bruselas, ni las medidas reformistas implementadas después de la crisis", asegura Fernández de Mosteyrín.

La Bolsa respira

Antes de que triunfara la moción de censura, algunos miembros del Gobierno alertaron de posibles caídas en Bolsa si Sánchez llegaba a Moncloa. "Esta moción de censura nos está costando a los españoles en términos de confianza y estabilidad", aseguró la exvicepresidenta Soraya Sáenz de Santamaría.

Sin embargo, los analistas se muestran mucho más preocupados por la inestabilidad política que por un cambio de Gobierno. Todos coinciden en que las caídas en los mercados sufridas durante la última semana se debían a la situación de Italia.

El Ibex 35 cayó un 5,2% durante el mes de mayo, que tradicionalmente es uno de los meses con más volatilidad en los mercados. Una vez que Italia formó Gobierno, el índice de referencia de la Bolsa española subió este viernes un 1,76% y se elevó de los 9.465,50 puntos hasta los 9.632 puntos, a pesar de que el Congreso había aprobado la moción.

Conviene recordar que el Ibex 35 no refleja la realidad de la economía española. El sector bancario y el eléctrico tienen mucho peso, mientras que el turismo solo está representado por una compañía (Meliá Hotels).

Así ha sido la evolución del Ibex en el último mes:

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Un síntoma de que la economía española va bien sería que el nuevo presidente pudiera culminar la privatización de Bankia, vendiendo el 60% que posee el Estado a un buen precio y recuperar así la mayor cantidad del dinero público inyectado posible. Para ello, Sánchez necesita estabilidad en los mercados y subidas en la Bolsa.

El Frob debería deshacerse de esa participación antes del 31 de diciembre de 2019. Pero ahora muchos dudan de que ese plazo se pueda cumplir y plantean que se pedirá una prórroga.

"La economía española en la actualidad viene mostrando un crecimiento fuerte y si el nuevo Gobierno se ciñe a cumplir los Presupuestos Generales del Estado recién aprobados, el crecimiento económico no debería descarrilar", explica Paula Sampedro, analista financiero de Link Securities.

"La situación podría empeorar si la delicada composición de gobierno empieza a hacer inviable la aprobación de leyes y el estancamiento comienza a hacer mella en el crecimiento. Esto sí podría provocar una pérdida de confianza de los inversores", asegura Victoria Torre, responsable de desarrollo de contenidos, productos y servicios en Self Bank.

El contexto externo empeora

La economía española ha gozado durante los últimos años de un contexto favorable en el que el petróleo estaba barato y el Banco Central Europeo compraba deuda.

Sin embargo, esto ha empezado a cambiar. El organismo presidido por Mario Draghi ha empezado a reducir este programa de estímulos monetarios, que se inició en 2015. El objetivo del BCE es que el próximo año desaparezca. El calendario de retirada de los estímulos se decidirá el próximo 14 de junio en la ciudad de Riga (Letonia), en la que se estrenará como vicepresidente el exministro Luis de Guindos.

Gracias a la aplicación de este programa, el euribor (tipo de interés por el que los bancos se prestan el dinero entre sí y que sirve como referencia en las hipotecas) se ha situado en niveles mínimos históricos. Al desaparecer los estímulos, el euribor subiría y se encarecerían las hipotecas.

Por otro lado, el precio del barril de petróleo de calidad Brent (el que se utiliza como referencia en Europa) ronda los 80 dólares tras la decisión de Donald Trump de romper el acuerdo nuclear con Irán.

"Una subida de los precios del petróleo provoca aumentos en los precios de la gasolina y de los derivados del oro líquido", asegura Sergio Ávila, analista de mercados de IG, a El HuffPost.

En España, un país con una gran dependencia energética, las familias verían cómo se incrementa su factura energética, así como, más a largo plazo, el precio de otros productos de consumo, que se transportan por carretera.

Así ha evolucionado el precio del petróleo Brent en los últimos seis meses:

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Aún más razones para la inquietud. El presidente de Estados Unidos, Donald Trump, ha empezado a aplicar su programa de proteccionismo económico con la imposición de aranceles si se quieren importar productos como biotecnológia, acero o aluminio desde la UE, Canadá y México. Grandes empresas como Acerinox, Gestamp y Arcelor Mittal serían las más afectadas directamente por los aranceles, como explica Voz Pópuli.

El reto del empleo

Quizás el reto más importante que tiene Sánchez es la creación de empleo. La tasa de paro se ha situado en el 16,7% en el primer trimestre del año, según la EPA. En total, hay 3,79 millones de españoles en situación de desempleo. Funcas pronostica la creación de cerca de 850.000 puestos de trabajo en los próximos dos años.

"En los últimos años se han destruido muchos puestos de trabajo en la construcción (más de un millón de empleos) y en la industria (cerca de 700.000 empleos), que no tiene pinta que vayan a recuperarse", señala la economista Lídia Brun.

"Antes de la crisis tenía mucho peso la actividad de la construcción que es muy intensiva en mano de obra. La EPA señala que se destruyeron 3,4 millones de empleos y se han recuperado 1,6 millones hasta finales de 2017. En términos de afiliación a la Seguridad Social entre 2007 y 2013 se perdieron 2,9 millones de afiliados y desde entonces se han recuperado 1,9 millones. Se ha recuperado en torno a la mitad del empleo que se perdió durante la crisis", apunta María Jesús Fernández, economista senior de Funcas.

También son preocupantes las condiciones laborales de los nuevos empleos, debido al aumento de la tasa de temporalidad. El 27,5% de los trabajadores españoles tiene un contrato temporal, el nivel más alto de todos los países de la Unión Europea. Incluso, el FMI ha alertado de la gran dualidad del mercado de trabajo: excesiva protección del empleo fijo en relación a la desprotección del temporal.

Si no puedes ver el gráfico, sigue este enlace.

Acabar con la brecha salarial

Uno de los compromisos adquiridos por Sánchez durante el debate de la moción de censura fue impulsar leyes contra la brecha salarial de género.El salario medio de un mujer en España es de 20.131 euros brutos al año, mientras que el de un hombre alcanza los 25.924 euros, según los datos de la encuesta anual de estructura salarial de 2016 del INE publicados esta semana. Es decir, las mujeres cobran 5.800 euros menos que los hombres, un 22% menos.

Los expertos señalan que son necesarias medidas legales, como exigir transparencia en las empresas o igualar los permisos de maternidad y de paternidad al tener un hijo, para que el trabajo de cuidados no recaiga exclusivamente sobre la mujer.

"A partir de la edad en la que se entra en la maternidad, alrededor de los 30 años, la brecha salarial de género se agranda. Hay evidencia clara de que con el primer hijo, la mujer "acomoda" su situación laboral para una mejor conciliación entre familia y trabajo. Estos movimientos como una reducción de jornada provocan una mejora en la conciliación pero a costa de una renuncia a una mayor promoción profesional", explica Sara de la Rica, catedrática de Economía por la UPV.

La factura de las pensiones

La Comisión del Pacto de Toledo debate desde hace tiempo una reforma del sistema público de pensiones. Actualmente, el sistema español se basa en la solidaridad intergeneracional: los trabajadores actuales financian las prestaciones de los que son jubilados en ese mismo momento.

En concreto, la Seguridad Social destina aproximadamente 9.000 millones de euros para pagar las pensiones cada mes. Sin embargo, los recursos no son suficientes para hacer frente a las pagas extras, ya que en junio y diciembre la cantidad a pagar se duplica. Rajoy tuvo que echar mano del Fondo de Reserva de la Seguridad Social (la "hucha de las pensiones"), que casi está vacío, y pedir préstamos para financiarlas.

Además, el PP y el PNV pactaron subidas de las prestaciones este año entre el 1,6% y el 3% tras las masivas manifestaciones de los jubilados. Esto incrementará la factura a pagar cada mes.

Sánchez se comprometió a "reconstruir los consensos rotos en el marco del Pacto de Toledo", pero no parece que vaya a impulsar una reforma profunda o a derogar la reforma de pensiones de 2013.

Veremos qué puede hacer finalmente el Ejecutivo de Sánchez y si logra todo lo que ha prometido.