Lo que iba a ser el futuro... y lo que ha sido: la reflexión que arrasa porque es tan dura como cierta

Lo que iba a ser el futuro... y lo que ha sido: la reflexión que arrasa porque es tan dura como cierta

Son muchos los que se sienten identificados.

graphicnoi via Getty Images

Parecía que todo iba a ser maravilloso: los robots iban a descargarnos de las tareas más pesadas, cada uno iba a trabajar en lo que quisiera, iba a tener un sueldo digno que le permitiese llevar adelante sus proyectos vitales y no íbamos a hablar ni de fugas de cerebros, ni de generaciones perdidas ni de juventud sin futuro. Parecía, pero no.

El desengaño de toda una generación ha sido resumido por un joven de Sevilla en un tuit que muestra por derecho la diferencia que hay entre las expectativas sobre lo que iba a ser el futuro y la mierda lo que ha sido.

"Año 2000: los trabajos del futuro van a ser probador de videojuegos, criador de robots, guía turístico de viajes espaciales.

Año 2018: Toma esta mochila cuadrada y vete a repartir en bici por tres euros el pedido".

Su tuit, sin mencionar ninguna empresa, hace referencia directa a un modelo de negocio que está creciendo en muchas ciudades y que es considerado por muchos el epítome de la explotación: microtrabajos que no dan para vivir y en los que el trabajador no tiene asegurados sus derechos mínimos.

Como era de esperar, su cruda reflexión ha hecho fortuna en Twitter, donde tiene ya más de 11.000 retuits y cerca de 27.000 'me gusta'. Muchos, está claro, se sienten identificados.