¿Eres reactivo o proactivo?

¿Eres reactivo o proactivo?

Los 88 Peldaños del Éxito

El éxito se encuentra en la proactividad, no en la reactividad.

Ésta es la historia de dos peluqueras. Una se caracterizaba por ser reactiva y la otra proactiva.

La reactiva se limitaba a colgar la información en la puerta de su peluquería y simplemente responder a las preguntas que la gente le hacía.

—¿A qué hora abren? —A las cinco. —¿Cuánto cuesta el corte de pelo? —30 euros. —No estoy muy segura de qué tipo de corte hacerme. —En cuanto concierte una cita, viene y lo vemos. —De acuerdo. Pues yo les llamo si me interesa. Gracias.

Acababan haciendo uso de sus servicios una de cada diez personas que podían haberse quedado. Nueve de cada diez acudían a otra peluquería, y la décima restante se quedaba sólo porque no encontraba una alternativa mejor.

Así reaccionaba la peluquera proactiva ante una pregunta similar.

—¿A qué hora abre?

—A las cinco. ¿Tiene en mente hacerse un peinado o un corte de pelo?

—Un corte, pero no estoy muy segura de qué tipo de corte hacerme.

—Hagamos una cosa. Si tiene dos minutos, siéntese un momento y yo la peino sin ningún tipo de compromiso por su parte y le analizo qué le podría quedar bien.

—Qué amable. Gracias.

—Tiene una cara muy fina por lo que ahora mismo quizá tenga demasiado volumen en el pelo. El volumen le roba protagonismo a su rostro. Estoy segura de que lo que más realzaría su belleza sería cortarse un poco de los lados y parte del flequillo. Se va a encontrar guapísima.

—Sí, lo había pensado pero no paraba de darle vueltas porque me sentía insegura con todas las opciones.

—¿Qué le parece hacer una cita para esta tarde a las cinco o las seis? El precio son 80 euros. Le aseguro que quedará contenta. Si no lo está, le devolvemos su dinero.

—¿De verdad?

—Sí. Nunca nos ha sucedido.

Extraigamos lecciones: le hablaba con confianza, se creía lo que decía, no le mentía, la peluquería es su pasión por lo que es fácil para ella dar un consejo e implicarse en lo que dice, la sugestiona positivamente, pero por encima de todo, no lanza una semilla a ver si acaba germinando, sino que traza un camino para que germine. Es proactiva. Provoca el árbol. No espera a ver si surge. Siempre digo que en la construcción de 8Belts y en el período de crecimiento posterior hasta alcanzar el éxito actual, yo he cometido todos los errores que se pueden cometer. Uno de ellos fue ser reactivos en las ventas durante el primer año. Error garrafal.

¿Resultado? Vendíamos tan poco que apenas llegábamos a fin de mes. Yo no entendía el porqué y me pasaba noches enteras dándole vueltas. Después de todo había dado con una fórmula que era única en el mundo. Pero lo que no sabía es que incluso la fórmula de la Coca-Cola necesita ser vendida. Un día me di cuenta de que la clave estaba en ser proactivo. No esperar a que el cliente se pronunciase, sino ofrecerle hacerlo. Desde aquel entonces todas las personas que prueban el producto reciben inevitablemente una llamada antes del fin de su prueba de un miembro de nuestro equipo. No es necesario que me creas. Puedes comprobarlo tú mismo. En este enlace te regalo ocho días para que conozcas qué tiene de singular la metodología y antes del octavo recibirás una llamada de alguien que te preguntará qué tal te ha ido y te ofrecerá la posibilidad de continuar. Nosotros hemos aprendido la lección. ¿Y tú? www.8belts.com/88peldaños

#88peldaños

Ser reactivo es ceder el control. Ser proactivo es tenerlo.

@Anxo