'B' de Bárcenas

'B' de Bárcenas

En 2014, fui a ver Ruz-Bárcenas al Teatro del Barrio. Aluciné. Jordi Casanovas había usado la transcripción literal de la declaración de Bárcenas ante Ruz como texto teatral. Y Alberto San Juan había conseguido el milagro de que aquello fuera un éxito y despertara interés y emoción. Así que allí fui yo, novato, a decirles que podíamos llevarlo al cine.

B LA PELICULA

En 2014, fui a ver Ruz-Bárcenas al Teatro del Barrio, una cooperativa de Lavapiés, Madrid. Aluciné. Jordi Casanovas había usado la transcripción literal de la declaración de Bárcenas ante Ruz como texto teatral. Y Alberto San Juan había conseguido el milagro de que aquello fuera un éxito y que te despertara interés y emoción. Pedro Casablanc (Bárcenas) y Manolo Solo (Ruz) te ponían de frente ante el duelo de interpretación más difícil que he visto en mucho tiempo.

Así que allí fui yo, novato, a decirles que me parecía un trabajo enorme y que podíamos llevarlo al cine. Confiaron en mí con generosidad, y aquí estamos. También fue un milagro hacer la película con tan pocos recursos, apoyados en el micromecenazgo de 596 personas que apostaron por nosotros, sin televisiones ni ayudas públicas. Con trabajo. Y con la verdad.

La película ha estado seis semanas en cartelera, y créanme, hoy en día, es una heroicidad. Seguimos "de gira" con ella por ciudades a las que no llegó comercialmente. Haciendo coloquios. Viendo las caras de estupor del público. Viendo sus ganas de hablar. Las mismas que tuve yo con mis amigos al verla en el teatro.

Pedro Casablanc y Manolo Solo están de Goya. Y no lo digo yo, lo dice la crítica. Esta no es una historia basada en hechos reales. Es una historia real. Es la fotografía de lo que Bárcenas dijo aquel 13 de julio a Ruz. Aunque hayan oído hablar de ello, se sorprenderán. ¿La verdad no cambia nada? Eso dijo Berlusconi al ser condenado por primera vez. El primer paso es conocerla.

Ahora sólo hay que darle al play. Ahora o esta noche, o cuando le apetezca. Gracias al Huffington por entender que sus lectores quieren la verdad para sacar sus propias conclusiones. Cojan palomitas: aunque parezca mentira, se reirán. PLAY.