Amnistía denuncia "discriminación" a los mayores durante la pandemia en España

Amnistía denuncia "discriminación" a los mayores durante la pandemia en España

El informe destaca también el abandono que sufrió el personal sanitario y denuncia actuaciones “arbitrarias” de las fuerzas de seguridad en el estado de alarma.

Una mujer mayor con síntomas de coronavirus es trasladada a un hospital desde un geriátrico de Barcelona.Miquel Benitez/Getty

Amnistía Internacional ha denunciado “discriminación y violación del derecho a la salud” a las personas mayores en España y ha advertido del “desproporcionado” número de muertes de personas de avanzada edad durante la pandemia del coronavirus, en su informe anual –correspondiente al 2020–, que analiza la situación de derechos humanos en 149 países.

El informe destaca también el abandono que sufrió el personal sanitario en España durante los primeros meses de la pandemia, además de denunciar actuaciones “arbitrarias” de las fuerzas de seguridad en el estado de alarma.

La ONG recuerda que en noviembre se estimaba que 20.000 personas habían muerto en las residencias de mayores (el 50% de los fallecimientos totales por coronavirus hasta ese momento) y denuncia los protocolos de derivación a centros hospitalarios que se adoptaron en algunas comunidades, que fueron “discriminatorios” y violaron el derecho a la salud.

Critica asimismo el confinamiento “indefinido” de muchos mayores en sus habitaciones, con escaso o nulo contacto con sus familiares y sin supervisión efectiva de las autoridades. Esto, apunta, “dio lugar a violaciones de sus derechos humanos” en unas instalaciones en las que faltaba personal y medidas de protección.

En Madrid y Cataluña

En un comunicado, el director de Amnistía Internacional en España, Esteban Beltrán, critica en concreto la situación vivida en las residencias de Madrid y Cataluña y considera que la respuesta del personal sanitario en esta pandemia “ha sido una de las mejores muestras de humanidad que nos ha dejado el año 2020”.

A su juicio, en el último año el sistema de atención primaria en España ha sufrido dos pandemias, la de la covid-19 y la de una gestión sanitaria que ha situado este servicio público “entre el abandono y el desmantelamiento” por falta de planificación e inversión

El personal sanitario

Al final del año, destaca, al menos 93.000 trabajadores de la salud habían contraído la COVID-19 (el 5,1% de los casos) y 89 habían muerto por la enfermedad.

En las primeras semanas hubo escasez de equipos de protección individual de calidad, que llegaron aún con más retraso a centros no hospitalarios, como los de atención primaria o las residencias, y durante los primeros tres meses el personal sanitario tuvo acceso limitado a los test.

“Uso excesivo y desproporcionado” de la fuerza

Como es tradicional en sus informes, la ONG vuelve a criticar la denominada ley mordaza y alerta de que persistieron las denuncias sobre “uso excesivo y desproporcionado” de la fuerza por parte de agentes, encargados de hacer cumplir las reglas del estado de alarma.

Según este estudio, la policía puso más de un millón de multas y sancionó “arbitrariamente” a algunas personas por saltarse el confinamiento impuesto por la pandemia, como periodistas o personas sin hogar, al carecer de criterios claros para ejercer sus funciones.

El informe incluye un capítulo dedicado a la inmigración y aplaude el vaciamiento de los centros de internamiento de inmigrantes en los primeros meses del estado de alarma, después reabiertos.

Las principales críticas se dirigen a las condiciones “inhumanas” que vivieron muchos inmigrantes en las Islas Canarias, desbordadas al aumentar las llegadas cerca de un 757%; a las expulsiones sin respetarse las garantías legales, y a las decenas de miles de solicitudes de asilo acumuladas.

“Hubo personas migrantes y solicitantes de asilo que continuaron viviendo en centros de acogida soportando condiciones de hacinamiento y sin protección adecuada frente a la covid-19”, alerta Amnistía, que pone el foco en Melilla.

Además, el informe recoge el “significativo aumento” de las llamadas al 016, el teléfono contra la violencia machista. En concreto, el documento señala que durante el confinamiento, el número de mujeres que llamaron a estas líneas telefónicas de ayuda gestionadas por el Ministerio de Igualdad aumentó un 60% respecto al mismo periodo del año anterior, y el número de consultas online, un 586%. Asimismo, recuerda que un total de 45 mujeres murieron a manos de sus parejas o exparejas.